Al menos diez personas han fallecido y otras 37 han resultado heridas, entre ellas dos bomberos, y varias de ellas de gravedad en la madrugada de este martes por un gran incendio registrado en una vivienda en el oeste de la capital francesa, París. El incendio, que ha comenzado alrededor de la 01.00, se ha producido en una vivienda de ocho plantas en el distrito 16 de París y las autoridades consideran que es intencionado. A última hora de la tarde, la Prefectura de Policía de París ha anunciado que la mujer sospechosa del incendio había sido ingresada en la división psiquiátrica de la misma.
La principal sospechosa, de 40 años, fue arrestada en una calle cercana al edificio incendiado cuando, en estado de embriaguez, intentaba prender fuego a varias papeleras y a un vehículo aparcado. Tras someterla a un examen médico y de comportamiento, su detención fue suspendida y se dictaminó su traspaso al centro médico policial. Los testigos de lo ocurrido informan que la mujer tenía la música muy fuerte lo que provocó que un vecino del edificio, precisamente un bombero, acudiera a quejarse del ruido que estaba provocando.
Tras una fuerte discusión con intercambio de insultos, la mujer le amenazó con provocar un incendio ya que él era bombero. La sospechosa enloqueció y comenzó a lanzar objetos por la ventana. El altercado propició que la policía acudiera al edificio, pero no consideró necesario intervenir, ya que el vecino se había ido a dormir a otro lugar. Poco después se declaró el fuego, que comenzó en la segunda planta del edificio y se propagó por todo el inmueble a gran velocidad. La mujer era conocida en el inmueble incendiado por su adicción al alcohol, sus antecedentes y su inestabilidad psíquica, que en varias ocasiones la habían llevado a ser internada en psiquiátricos.
Las llamas, que comenzaron sobre la una de la madrugada, no fueron controladas hasta las 6.30, precisó un portavoz del cuerpo de bomberos. Agregó que no se descarta que puedan aparecer nuevas víctimas entre los daños causados en el edificio, situado en el oeste de la capital francesa, en particular en las plantas superiores, las últimas en las que se extendió el fuego
Al lugar del incendio han acudido hasta 250 bomberos para trabajar en la extinción del fuego y atender a las personas que han resultado heridas, según informa EP. Se trata de un edificio de los años 70, situado cerca del bosque de Bolonia, uno de los pulmones verdes de la ciudad, que quedó devastado, lo que obligó a evacuar otros dos bloques adyacentes como medida de precaución.
Según varios testigos, las primeras llamas aparecieron en la parte alta del edificio, en el séptimo piso, y se propagaron de forma "extraordinariamente rápida", según el relato de los bomberos. Las llamas se declararon del lado de un patio interior del edificio, lo que dificultó las labores de los bomberos para controlarlo.
Muchos vecinos se refugiaron en el tejado del edificio, lo que obligó a los bomberos a complicadas labores de salvamento, mediante el uso de escaleras de mano, poniendo en peligro sus propias vidas, indicó un portavoz del cuerpo, Clement Cognon. Según indicó a la televisión "BFMTV", con este sistema, fueron rescatadas medio centenar de personas. Aseguró que, de las 15.000 intervenciones al año que efectúan en la capital, "esta se desarrolló con una particular violencia".
El fuego sorprendió a muchos vecinos dormidos, lo que, sumado a la velocidad con la que se propagaron las llamas, puede explicar el elevado número de víctimas.
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