China se lanza a la lucha contra el terrorismo a golpe de lanzallamas

China ha intensificado sus acciones en lucha antiterrorista sin ponerse límites. La prensa local ha anunciado que la policía utilizó un lanzallamas para capturar a 10 presuntos terroristas que se habían refugiado en una cueva en la región de Xinjiang.

Según ha anunciado el Gobierno, las fuerzas de seguridad acabaron el viernes con la vida de 28 presuntos terroristas que se habían ocultado en una cueva. Pekín ha reconocido el uso de granadas y de gases lacrimógenos, sin embargo, un miembro de las fuerzas de seguridad explicó a la prensa que había ido más allá.

“Usé el lanzallamas”, declaró un agente al diario ‘Ejército de liberación del pueblo’. Después de este ataque, los terroristas abandonaron la cueva en la que se refugiaban “portando cuchillos”, para ser posteriormente aniquilados por los miembros de las fuerzas de seguridad.

En las últimas semanas, el gobierno de China ha redoblado sus esfuerzos en la lucha contra presuntos terroristas. Pekín está centrando sus objetivos en la región de Xinjiang, de marcado carácter musulmán.

 "Los atentados de París dan a China una excusa política para utilizar lanzallamas y así tomar medidas contra los musulmanes uigures, que están desarmados y que no tienen una protección legal", ha afirmado a través de un comunicado el portavoz del grupo exiliado Congreso Mundial Uigur, Dilxat Raxit, en respuesta a estos ataques.

En las últimas semanas, China se mostró dispuesta a la lucha contra el terrorismo, a raíz de los ataques del 13-N y del asesinato de un ciudadano de su país por el Estado Islámico. Los países de Occidente son reacios a cooperar con el operativo antiterrorista de China ya que, de esta forma, podrían implicarse en la violación de los derechos.