Escudos humanos para evitar la plaga de violaciones en masa a mujeres en la plaza Tahrir de El Cairo

Decenas de violaciones grupales en menos de 24 horas. Ese es el precio que han tenido que pagar las mujeres egipcias por mostrar su desacuerdo contra el gobierno de Mohamed Morsi en la Plaza Tahrir de El Cairo.

Sólo la tarde del domingo, al menos 46 mujeres denunciaron abusos sexuales por parte de manifestantes incontrolados. La última violación masiva la sufrió ayer una periodista holandesa que informaba desde el epicentro de la protesta.

Para evitar esta plaga de agresiones sexistas, un grupo de voluntarios creó la plataforma Operation Anti-Sexual Harassment (OpAntiSH), cuyos integrantes se ofrecen como 'escudos humanos' para que las mujeres puedan acudir libremente y sin miedo a las protestas.

OpAntiSH ha denunciado 'ataques físicos con palos contra las mujeres por parte de hombres', además de revelar que 'varias mujeres han sido secuestradas en vehículos'. Por eso los activistas de este colectivo han decidido jugarse el pellejo para crear un pasillo de seguridad que evite los abusos.

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