Familias de 8 detenidos por red islamista confían prospere recurso libertad

  • Los familiares de los ocho ceutíes detenidos el pasado 21 de junio en Ceuta en una operación contra una presunta red de captación y envío de personas para combatir en Siria confían en que sean puestos en libertad a través de un recurso de reforma presentado ante la Audiencia Nacional.

Ceuta, 14 jul.- Los familiares de los ocho ceutíes detenidos el pasado 21 de junio en Ceuta en una operación contra una presunta red de captación y envío de personas para combatir en Siria confían en que sean puestos en libertad a través de un recurso de reforma presentado ante la Audiencia Nacional.

Las defensas de los ocho detenidos -seis de los cuales son defendidos por el abogado Marcos García Montes- han presentado un recurso contra el auto dictado por el juez Ismael Moreno el pasado 24 de junio en el que ordenó la prisión de los ocho presuntos terroristas yihadistas detenidos en Ceuta, según han explicado a Efe fuentes judiciales y del entorno familiar.

El abogado Marcos García Montes señala en el recurso que no está acreditado el riesgo de fuga, considera que no hay indicios suficientes para mantenerlos en prisión y argumenta que buena parte de los detenidos "tienen una vida laboral positiva, lo que no hace pensar que se ganaran la vida de forma ilícita, ni que hayan tenido problemas a la hora de busca trabajo, no encontrándose ninguno ostentando un trabajo desconocido".

El abogado aporta al recurso una muestra de documentos personales de los detenidos para justificar que son personas integradas que tienen, en su mayoría, trabajos u ocupaciones y que para nada están relacionados con prácticas radicales.

Marcos García Montes apunta que la religiosidad de alguno tampoco debe ser tenida como vinculación radical.

Los familiares han expresado su confianza en que se atienda esta petición de libertad a la mayor brevedad posible.

Los ocho ceutíes fueron detenidos en una operación desarrollada a primeras horas de la mañana del pasado día 21 de enero en la barriada del Príncipe Alfonso, donde se desplegaron unos cuatrocientos agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil.

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