EEUU vive bajo la angustia de ver como día tras día la policía acaba con la vida de afroamericanos y viceversa. La última grabación sobre el estrangulamiento y posterior muerte de un recluso a manos de un guardia ha desatado de nuevo la polémica.
En una grabación de las cámaras de vigilancia de una cárcel en la ciudad de Caddo (Oklahoma, EE.UU.), puede verse la muerte que sufrió el recluso afroamericano Darius Robinson, detenido por no haber pagado la manutención de su hijo.
En el vídeo, que data de abril pero que ha sido difundido ahora, se puede ver cómo después de que el hombre intenta atraer la atención de los guardias, estos entran en la celda y uno de ellos estrangula a Robinson hasta que su cuerpo se queda inmóvil. A continuación, los guardias le ponen esposas.
"En ese momento, incluso un supervisor dio la orden de 'estrangularlo', algo muy sorprendente de decir tratándose de un policía", destacó el abogado Malik Shabaz, citado por medios locales, quien agregó que eso es algo "inaceptable", porque "un carcelero no puede ser un verdugo".
La autopsia reveló que Robinson fue estrangulado y que su traquea resultó aplastada.
El recluso necesitaba atención médica, y los abogados de la víctima recuerdan que el personal de la cárcel lo sabía, pero el hombre no llegó a recibirla. Los abogados que representan a los familiares de Robinson afirmaron que planean presentar una demanda federal.
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