"Estamos siendo testigos de una creciente predisposición a usar la violencia por parte de la extrema izquierda y la extrema derecha", aseguraba el ministro del Interior alemán, Thomas de Maiziere esta semana. Una ola creciente de incidencias violencias centradas en refugiados y que continúan en aumento, de 199 hasta 1.031 casos, tras la llegada de más de un millón de refugiados a Alemania en el pasado 2015.
Tras los ataques de Año Nuevo registrados en Colonia, más de 500 denuncias por agresión sexual que ponían bajo el principal foco de sospecha a las personas refugiadas, Alemania ha experimentado un creciente aumento de violencia contra el más de un millón de personas que huyeron de una guerra.
"El número de ataque contra refugiados ha aumentado desde 199 hasta 1.031 casos y en los primeros meses de este año la situación ha empeorado: desde enero se detectaron 449 ataques contra los centros de acogida, incluidos 82 mediante violencia", dijo Maiziere en una entrevista al grupo mediático Funke recogida por la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
De Maiziere destacó que, desde enero de 2016, "se registraron 654 crímenes contra los refugiados, entre ellos 107 con uso de violencia". El ministro alemán ha precisado que gran parte de los delitos son de naturaleza verbal y amenazas por Internet, en lo que calificó como "un nuevo fenómeno".Solo tres de los 58 detenidos en Colonia eran refugiados
De acuerdo con las autoridades alemanas, el incremento de la violencia racista al comienzo de 2016 tiene como detonante las más de 500 denuncias por agresión sexual en Colonia la pasada fiesta de Nochevieja. Varias de las declaraciones de las víctimas apuntaban a los refugiados como responsables de estas agresiones. Sin embargo, las investigaciones no coinciden con estos testimonios.
Solo tres de los 58 detenidos por lo sucedido en Colonia el pasado 31 de diciembre eran refugiados. Unos hechos que, además, llevaron al partido CDU a endurecer los castigos a los criminales extranjeros y que llevaron a un alto porcentaje de la población alemana a cambiar su percepción de estas personas.
Según una encuesta realizada por la segunda cadena de televisión pública alemana ZDF, un tercio de los encuestados reconoció haber cambiado de opinión tras lo ocurrido en Colonia, y un 60% consideró que Alemania no puede hacer frente a tantos refugiados, dato que tan solo un mes antes, en diciembre de 2015, era del 46%. Además, en el mismo estudio, un 70% de los ciudadanos consideró que la llegada de tantos refugiados se traduciría en un incremento de la criminalidad en Alemania. 45 incendios contra centros de refugiados
El odio no conoce límites ni distinciones, por eso las autoridades alemanas no pueden bajar la guardia. Una de las prácticas violentas que más preocupa a las autoridades alemanas es las relacionadas con varios incendios en centros de refugiados. Un total de 45 incidentes de este tipo se habrían dado en lo que va de año.
En el 2015, durante el cual 1,1 millones de migrantes llegaron a Alemania, fueron registrados un total de 92 incendios contra centros de acogida, frente a los 6 de 2014, de acuerdo a las estadísticas publicadas por la BKA a finales de enero.
"Los autores de estos actos criminales son en su mayoría hombres y casi el 80% de ellos vienen del lugar donde se comete el acto criminal", precisó el presidente de la policía criminal alemana (BKA), Holger Munch, quien negó tener consciencia de que grupos de extrema derecha estén detrás de estos actos vandálicos. La violencia inunda las redes sociales
Internet se ha convertido en el principal campo de batalla en materia de refugiados. De hecho, es tal las disputas que surgen en la red que en Alemania, algunos medios importantes -como la edición en línea de Spiegel -, han cerrado sus foros de discusiones en los temas relacionados con los refugiados, tras recibir una profusión de comentarios ofensivos por parte de los internautas.
Con la llegada de los flujos migratorios, el país europeo se ha visto inmerso en una inquietante espiral de violencia contra la población acogida, impulsada por la ascensión de los grupos de extrema derecha.La extrema derecha es cada vez más fuerte
No solo en las calles se ve el creciente aumento de la extrema derecha, sino que también es palpable en las urnas. El pasado mes de marzo los ciudadanos alemanes juzgaron por primera vez la gestión de la crisis de los refugiados por parte de la canciller Ángela Merkel.
Unas elecciones que dieron al ultraderechista 'Alternativa para Alemania' unos resultados históricos convirtiéndose en la segunda fuerza política con más del 20% de los votos en Sajonia.
El partido realizaba esta misma semana unas duras declaraciones contra la iglesia a la que acusaba de comercializar con la mayor crisis de refugiados de Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
El interés de las dos grandes iglesias del país —la católica y la evangélica— en la acogida de refugiados responde a "razones comerciales", afirmó el líder del partido en Baviera, Petr Bystron, en la edición alemana de Hufftington Post.
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