Perfil: Asef Shaukat, el cuñado que ya nunca más podrá proteger a Asad

La televisión estatal siria confirmaba esta mañana que Asaf Shaukat, cuñado del líder sirio y número dos del ministerio de Defensa, ha sido uno de los muertos en el ataque rebelde en la sede del Consejo Nacional de Seguridad en Damasco.

Hasta su muerte, Shaukatera considerado como uno de los máximos responsables de alta seguridad de Asad, cuenta la BBC. Su suerte comenzó en 1990, siendo oficial de infantería, cuando se casó con la única hermana del actual presidente.

Después de recibir la bendición de los hermanos varones de Bushra, fue recibido en el seno de la familia Asad, donde forjó una muy buena relación con Bashar.

Sin embargo, durante varios años ha sido objeto de rumores las tensiones entre Shaukat y sus demás cuñados, incluyendo un episodio no confirmado en 1999 en el que Maher al Asad, el hermano menor, había disparado supuestamente a Shaukat en el estómago, informa The New York Times.

Pese a sus buenas relaciones con Bashar, en 2010 fue reemplazado como jefe de Inteligencia Militar y nombrado número dos del Estado Mayor por su responsabilidad como jefe en la muerte de un comandante militar.

El general Shaukat fue uno de los principales enlaces del presidente con las agencias de inteligencia de los EEUU y Europa tras el 11 S, antes de que las relaciones entre estas regiones se enfriasen. Y se dice, cuenta la cadena, que ha sido "un arquitecto clave de la dominación de Siria del Líbano".

A partir de 2011 Occidente lo señaló como uno de los principales impulsores de las brutales represiones durante las manifestaciones de la oposición contra Asad.

El pasado mayo, corrió el rumor de que había sido envenenado por los rebeldes, pero el suceso fue negado casi de inmediato por las autoridades quienes aludieron a "un intento para confundir a la población".

Durante el ataque de hoy varios altos cargos, entre ellos el ministro del Interior, también han resultado heridos. Todos estaban reunidos en la sede, cerca del palacio presidencial en Damasco, mientras los intensos combates con los rebeldes entraban en su cuarto día en la capital.