Mientras ya se ha rescatado con vida a ciento catorce mineros, los equipos de socorro continúan la búsqueda de los 39 mineros todavía atrapados en la mina en el norte de China, según la agencia oficial de noticias Xinhua. El rescate continúa siendo "un desafío", ha dicho Wang Jun, gobernador de la provincia de Shanxi, donde se encuentra la mina inundada.
Los equipos de emergencia continúan extrayendo a los supervivientes del pozo, con los cuerpos envuelto en mantas y los ojos vendados para paliar el frío y la fobia a la luz.
El pasado 28 de marzo, el pozo de Wangjialing Coal Mine, cercano a la ciudad de Linfen, sufrió una inundación que dejó atrapados a 153 de los 261 obreros que trabajaban en su interior.Cinco días después del accidente, los equipos de emergencia escucharon golpes regulares en tuberías de acero, que procedían de las profundidades del pozo.
Los socorristas respondieron con otros golpes en las tuberías y mediante cables enviaron a las profundidades 300 bolsas de glucosa y otros alimentos.Cuando izaron los cables, hallaron enganchada una pieza metálica eléctrica, que colgaron los supervivientes.
Los más de tres mil efectivos de socorro han conseguido bajar el nivel de la inundación en 2,6 metros y extraer del interior del pozo 57.900 metros cúbicos de agua.
La explotación, de unos 180 kilómetros cuadrados y todavía en construcción, es propiedad de la firma estatal Huajin Coking Coal Co. y se calcula que tiene en sus entrañas más de 2.300 millones de toneladas de carbón.
28 muertos en una mina ilegal
Al menos 28 personas han fallecido y otras 16 permanecen sepultadas por la explosión registrada en una mina en la provincia central china de Henan el pasado miércoles. Más de 500 efectivos mantienen desde entonces un operativo especial de rescate.
Un portavoz de la mina ha asegurado que la explosión mató a cinco mineros que se encontraban en la superficie y a 23 picadores que trabajaban en el subsuelo. Por su parte, un portavoz de los servicios de rescate informó que unos 90 empleados se encontraban en el interior de la mina cuando sucedió la explosión, cuyas causas todavía se desconocen.
La mina es propiedad de la empresa privada Guomin Mining Co., a la que se ha abierto una investigación. En cualquier caso, las autoridades regionales de Henan han comunicado que la mina operaba ilegalmente, ya que en mayo del año pasado se había notificado la orden de suspender cualquier actividad en ella debido a una explosión de gas.
De momento, el incidente ha provocado la dimisión del jefe del Partido Comunista de China (PCCh) en el distrito de Yichuan y de otros tres cargos oficiales.
Las minas chinas son las más peligrosas del mundo debido a la precariedad de sus métodos de seguridad y a la sobreexplotación de muchas de ellas, principalmente en invierno, cuando la demanda de carbón para calefacción sube en todo el país.Según datos oficiales publicados el pasado mes de enero, en 2009 perdieron la vida 2.631 mineros, lo que supone un descenso del 18,16 por ciento respecto a 2008.
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