Rusia ha comenzado la carga del último envío de uranio en el marco del programa "Megatones a Megavatios" para la conversión de uranio altamente enriquecido en el de bajo enriquecimiento y su posterior uso en centrales nucleares de EEUU.
El acto del envío, con el que Rusia completa las entregas de uranio previstas en el proyecto, contó con la asistencia de representantes de los organismos públicos de ambos países y de las empresas rusas y extranjeras miembros del programa
Según explicó un portavoz de la corporación estatal Rosatom, el último cargamento consta de 10 cilindros de material radiactivo y tiene un peso total de 160 toneladas. Se enviará por mar de San Petersburgo al puerto estadounidense de Baltimore.
Por su parte, Andréi Konchak, director general de la compañía de transporte marítimo Baltic Mercur, destacó que en las dos décadas del programa se han trasladado más de 10.000 cilindros con 1.500 toneladas de uranio cada uno.
El programa "Megatones a Megavatios" fue puesto en marcha en 1993 tras la firma de un convenio ruso-estadounidense conocido como Tratado HEU-LEU que prevé la transformación de un total de 500 toneladas métricas de uranio altamente enriquecido en el de bajo enriquecimiento.
A lo largo de los 20 años del proyecto, ambos países han realizado inspecciones mutuas periódicas para comprobar que el combustible se produce según los estándares y es usado exclusivamente con fines civiles.
Un programa que puede reportar a Rusia 17.000 millones
El uranio desmilitarizado es todo un negocio para Rusia. Y más si el que lo compra es EEUU. 17.000 millones puede ser el dinero recibido por el acuerdo 'Megatones a Megavatios', mediante el cual Rusia vende uranio enriquecido a EEUU que lo rebaja y lo usa en sus centrales nucleares. Negocio para todos. EEUU quita el uranio de las manos de Rusia (y evita un uso o centa inadecuado del mismo) y además recibe energía. Rusia, dinero, y mejores relaciones.
El diario Rossiyskaya Gazeta señala que el urarnio de las cabezas nucleares se usa como combustible en las centrales de EEUU desde hace 15 años y es el responsable del 50% de la energía nuclear producida por el país americano, lo que supone el 10% de toda la energía del país.
El programa Megatones a Megavatios se puso en marcha hace dos décadas. El primer envío tuvo lugar en 1995. La idea partió del doctor Thomas Neff, del Instituto Tecnológico de Massachisetts, que escribió en 1991 'El gran negocio del uranio'. Y no se equivocó.
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