¿Por qué los coches pasan tanto por la ITV y los conductores tan poco?

Un joven amigo me contó hace poco que había perdido casi todos los puntos del carné por saltarse algunas señales. Para recuperarlos se fue a una autoescuela a realizar un curso.

Pensé que era una medida puramente formal. Pero no: en el curso le enseñaron entre otras cosas, el peligro de conducir y manipular el móvil, justo lo que hacen muchos conductores y que causa tantos accidentes.

Por ejemplo, le demostraron que desviar la atención un par de segundos puede causar un accidente. Al final, él mismo salió sorprendido de la cantidad de cosas que no había advertido como conductor.

Eso me hizo pensar que todos deberíamos pasar periódicamente por las autoescuelas para recordar ciertas cosas que se nos han olvidado, o simplemente para afrontar cosas nuevas que desvían nuestra atención como el móvil o el GPS, por decir algo.

Si los coches de más de 4 años tienen que pasar por la ITV cada dos años (y anualmente cuando cumplen diez), ¿por qué no reducimos el plazo de los conductores para renovar el carné? Si no hemos cumplido 65 años, nos renuevan los carnés por 10 años. Después de esa edad, por cinco. Yo lo renové en 2010 y no me toca hasta el 2020. En ese lapso ha nacido WhatsApp y Telegram. Y en ese lapso se han popularizado los móviles inteligentes con GPS.

Es decir, los adelantos tecnológicos que pueden ayudarnos y despistarnos a la vez, surgen con más velocidad. Además, a medida que uno se hace mayor, pierde determinados reflejos. El problema es que los varones no quieren reconocer esas minusvalías. Conozco a una persona que con casi 90 años logró renovar su carné por 5 años más. Y estaba tan contento. En esos cinco años, existe un enorme riesgo de perder cualidades sensitivas. Enormes. ¿Nadie ha pensado en eso?

Pero la renovación del carné no habla nada de nuevos riesgos, sino que se limita a un examen psicotécnico y una prueba de reflejos bastante sencilla.

Pagamos 50 euros cada vez que tenemos que ir a la ITV. Las mismas compañías de seguros podrían subvencionar las visitas de los conductores a las autoescuelas pues se ahorrarían mas dinero subvencionando a los conductores que pagando accidentes. Hay que ser consciente de lo que supone conducir para evitar el riesgo de accidentes. Hay nuevos peligros y nunca viene mal recordar cosas que estaban en el manual de circulación.

Ahora que el carné por puntos cumple 10 años y ha demostrado su eficacia con la disminución de las muertes, podría dar un nuevo salto y premiar a los conductores precavidos que están dispuestos a pasar su ITV personal más periódicamente.