OPINION

No hace falta ser un rey para llevar una muleta futurista como “ayuda”

muleta1
muleta1

Cuando el domingo pasado el rey Juan Carlos bromeó, a la salida de la clínica donde fue operado de la rodilla, con lo moderna que era su muleta (“tienen amortiguación, luces y hasta claxon”), seguro que no imaginaba el favor que le estaba haciendo a un venezolano con sus palabras.

En menos de una semana estas muletas con luz y pito (a 120 machacantes el par), un producto exclusivo de Hidelasa, una tienda de ortopedia de un inmigrante que estaba al lado de la clínica madrileña, se han agotado en toda España.

Desde luego, lo de la luz y el sonido no deja de ser una tontería para una muleta. Todo el mundo sabe que lo importante es la comodidad y que la empuñadura sea anatómica para evitar que salga callo. Y que la muleta te ayude a llegar a tu destino, desde luego; aunque no seas un rey que está constantemente vigilado y guiado en sus movimientos.

Precisamente para que todas las personas con muletas se sientan como un Borbón, independientemente del color de la sangre que han dejado en el hospital, llega este modelo de muleta bautizado como “The aid” por su creador, el diseñador lituano Egle Ugintaite, que se acaba de llevarse el primer premio en el prestigioso concurso FUJITSU design award 2011.

Y es que lo que ha llamado la atención del jurado internacional ha sido que la muleta, además de llevarte, también te vigila a distancia. Como al rey.

Esta muleta está pensada principalmente para ayudar a las personas de edad avanzada o las que después de un trauma a menudo tienen falta de confianza para salir de su casa, causando en ellas aislamiento, depresión ...

"La ayuda" está diseñada para ser una verdadera "mano amiga"; para orientar y evitar que uno se pierda, proporcionando una sensación de seguridad y permitiendo recibir ayuda inmediata si la necesitan. Y, por supuesto, el apoyo físico de un bastón para caminar.

La muleta tiene un navegador integrado y un sensor en la parte de la muñeca que funciona como un dispositivo que monitoriza el pulso, la temperatura y la presión arterial. Todo ello junto con un botón de SOS que, al presionarlo cuando se necesita ayuda, contacta con el centro de emergencia y envía los datos del usuario y sus niveles para proporcionar asistencia inmediata a esa localización. Todo con sólo dos botones y un display de información.

La muleta se complementa con un auricular inalámbrico que lleva la persona en la oreja, por donde puede recibir instrucciones y toda la información necesaria para llegar a su destino. Para ello, antes de salir puede contactar con el centro de control vía Internet o por teléfono, para marcar su punto de llegada.

El servicio automático localiza la ruta más accesible para que el usuario de la muleta camine sin peligro (evitando las escaleras, por ejemplo) y manda los datos automáticamente al adminículo, que gracias a su navegador guiará a la persona con instrucciones por el auricular.

Cuando llega, la muleta comunica la posición al centro de control para confirmar un arrivo a casa sin problemas. Como un marqués. Bueno, mejor...¡como un rey!

Vía Inventor Spot

Mostrar comentarios