Zippo, la marca de encendedores más famosa del mundo, ha lanzado como novedad en este 2010 un concepto que saca un poco los pies del tiesto de lo que se entiende como mechero. Se trata de un kit para hacer fuegos de emergencia que permitirá ser usado en exteriores y con malas condiciones meteorológicas, consiguiendo un fuego con rapidez, lo que puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.
Este "Kit de encendido de fuegos de emergencia" utiliza la carcasa de un zippo pero en su interior sólo se guardan un potente pedernal para lanzar la yesca y una suerte de palitos textiles encerados resistentes al agua, que son los que se utilizarán para que prenda el fuego. Dichas varillas de encendido se guardan en una carcasa estanca, lo que permite llevar a buen recaudo la chispa vital en campamentos, caminatas, altitudes extremas, caza o realitys tipo "El conquistador del fin del mundo".
La forma de utilización es clara: se saca la varilla, se deshilacha la punta y se lanza la chispa, que prenderá convirtiendo la varilla en una potente cerilla. También se puede desplegar toda la tira para hacer una mini-manta incendiaria, que también recogerá la chispa del pedernal con gran efectividad.
El kit de fuegos de emergencia de zippo cuesta 16 € y busca encandilar a todos aquellos no fumadores y deportistas que no necesitan zippo para el vicio, pero que no dudarán en llevar el suave tacto metálico del famoso mechero en la mochila. Y más si les puede salvar la vida en un momento dado.
Los más puristas de los iniciadores de fuego quizá rehusarán pagar tanto por un producto muy similar a cualquier Fire-Steel de 4 euros, una llave metálica con alto contenido en carbono que basta con friccionar con un raspador para obtener una potente chispa de encendido. Sin embargo, estos puristas del acero y el pedernal echarán de menos algo seco que prenda con una sola chispa, cuando se vean debajo de un diluvio sin leña seca ni papel de periódico.
Para facilitarles la tarea Zippo también ha pensado en ellos con sus pastillas "Campfire" de cedro, una mezcla patentada de serrín comprimido de cedro embadurnada en cera que arde rápidamente, incluso cuando está mojada. La pastilla viene seccionada en cuatro "quesitos", los necesarios para iniciar cuatro fuegos y está hecha 100% natural con materiales reciclados.
Además, cuando prende, desprende un "increíble aroma a cedro rojo del oeste" que por lo menos reconfortará en esos momentos donde uno está perdido y piensa en el fin de sus días.
Posibilidades de que Zippo venda a manos llenas sus semi-zippos iniciadores: 100%, un zippo sigue siendo el regalo más socorrido de una dama poco imaginativa hacia su novio recién estrenado.
Fuente: Zippo
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