MÁS DE UN TERCIO DE LAS AVES MARINAS CONOCIDAS SUFRE ALGÚN TIPO DE AMENAZA

- Este miércoles se celebra el Día Mundial de los Océanos. Las aves marinas pasan casi el 90% de su vida en el mar, donde se alimentan, y representan el grupo de pájaros más amenazados en el mundo, puesto que más de un tercio de las 346 especies conocidas presentan algún tipo de amenaza y, según los últimos datos, su población global ha sufrido un declive del 70% en sólo 60 años, entre 1950 y 2010.
Así lo afirmó este miércoles SEO/BirdLife con motivo del Día Mundial de los Océanos, que se celebra hoy, 8 de junio, bajo el lema ‘Unos océanos sanos, un planeta sano’, ante lo cual la ONG urgió a reforzar la conservación de las aves marinas para garantizar mares saludables.
SEO/BirdLife indicó que España, con una localización estratégica que incluye tres regiones biogeográficas distintas (eurosiberiana, mediterránea y macaronésica) es el país con mayor diversidad de aves marinas de la UE.
Más de 40 especies son regulares en sus aguas y más de 20 nidifican en sus costas, islas e islotes, entre ellas la más amenazada de todo el continente europeo: la pardela balear (‘Puffinus mauretanicus’), que, con tiene una población en serio declive de apenas 3.000 parejas que se reproducen exclusivamente en Baleares y que, de seguir el ritmo actual, podría extinguirse en cerca de 60 años.
“La situación de la pardela es uno de los exponentes más claros del estado de amenaza que viven muchas aves marinas. En el mar se enfrentan al impacto de las capturas accidentales, a lo que habría que sumar la contaminación de las aguas con metales pesados, hidrocarburos o plásticos, y la disminución de presas, entre otras cuestiones”, explicó el biólogo Pep Arcos, responsable del programa marino de SEO/BirdLife.
Sin embargo, los problemas no acaban en el mar para la pardela. “En tierra firme, donde crían, su principal amenaza son actualmente los mamíferos introducidos, especialmente gatos y ratas. Al haber evolucionado en lugares sin depredadores terrestres, su llegada junto al ser humano ha representado un duro revés para esta y otras especies de aves marinas, muy torpes fuera del mar y sin mecanismo de defensa alguno”, añadió Arcos.
Por otro lado, esta edición del Día Mundial de los Océanos presta una especial atención a la contaminación por plástico que afecta a mares y océanos. Estos desechos (que, según un estudio publicado en la revista ‘Science’, aumentan en ocho millones de toneladas cada año) se degradan lentamente, contaminando el medio y a los animales marinos, que confunden las partículas de plástico con alimento.
En el caso de las aves marinas, se añade el problema de los enganches en el pico, algo que ocurre especialmente en ejemplares juveniles y que, en muchos casos, les ocasiona la muerte. Una investigación publicada en la revista ‘Marine Pollution Bulletin’, liderada por técnicos de SEO/BirdLife, calculó que más del 1% de los alcatraces de las costas ibéricas, canarias y norteafricanas portaban plásticos enganchados al pico, aunque en algunas zonas se alcanzaban valores del 20%.
AVANCES
Por otro lado, España ha experimentado avances en materia de conservación de aves marinas durante los últimos años, “al menos en el papel”, según SEO/BirdLife. Así, se ha extendido la superficie marina protegida por la Red Natura 2000 del 1% al 8%, incluyendo un 5% de Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Asimismo, se ha dado un giro hacia la sostenibilidad ambiental en la política pesquera comunitaria, que incluye un plan de acción europeo para minimizar las capturas accidentales de aves que están en vías de trasposición a legislación estatal, y se han puesto en marcha las Estrategias Marinas, que deberán asegurar un enfoque integrador a la hora de gestionar el medio marino, garantizando su buen estado de conservación.
“Sin embargo, el estado de conservación de los mares dista aún de ser adecuado. Están sometidos a un sinfín de presiones humanas: contaminación, destrucción de hábitats, sobrepesca, especies exóticas y cambio climático, solo por nombrar algunas”, apuntó Pep Arcos.

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