Ha pasado una semana desde que Apple comenzara a comercializar el iPhone 4, su nuevo modelo de teléfono móvil inteligente, y la compañía de Steve Jobs ya lleva, al menos, tres demandas judiciales por problemas técnicos.
Estas denuncias se deben, sobre todo, al mal funcionamiento de la antena del aparato, que impide realizar llamadas a través del dispositivo.
Cuando los clientes comenzaron a quejarse de que el iPhone 4 no funcionaba, Jobs les dijo que era por que ellos cogían mal el teléfono, tapando la antena con la mano. El presidente de Apple los invitó a devolver el iPhone, pagando un 10%, o a comprarse una funda que costaba 29,95 dólares. Los consumidores estadounidenses se sintieron heridos por estas declaraciones y comenzaron a denunciar a la empresa.
En una de las demandas, recogidas por El País, se dice que "el iPhone 4 presentó defectos de diseño y de fabricación que se conocían antes de su lanzamiento, pero que no se dieron a conocer a los consumidores", en referencia a la antena defectuosa. Las otras dos denuncias también acusan a Apple de negligencia y encubrimiento.
La antena no es el único problema
Mientras tanto, se rumoreó que los problemas con la antena se podrían resolver con una actualización de iOS4, algo que finalmente era falso. Al mismo tiempo, los usuarios comenzaron a observar más fallos, como en el sensor de proximidad (un dispositivo que apaga la pantalla durante una llamada para evitar que el usuario la corte con la cara), manchas en las pantallas o problemas con el balance de blancos de la cámara.
En España no se comercializa todavía el iPhone 4. Movistar anunció en su cuenta de Twitter que en un principio estaría disponible a partir de mediados de julio.Tanto esta compañía como Orange y Vodafone ofrecerán tarifas para sus clientes.
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