¿Qué puede hacer una casa inteligente hoy en día?

  • Estas casas pueden convertirse en un minihospital que de la primera voz de alarma ya que pueden incluir la gestión de alarma médica (detección de ritmo cardiaco, de temperatura corporal, petición de asistencia...).

    Las casas inteligentes disponen de contadores electrónicos que informan del consumo energético que pueden ahorrar hasta un 80% en los gastos de gas y de electricidad, un 30% de agua y un 20% de iluminación.

¿Qué puede hacer una casa inteligente hoy en día?
¿Qué puede hacer una casa inteligente hoy en día?
M.T.
M.T.

Zuckerberg quiere tener una casa tan inteligente como la que posee Iron Man, Y no dudamos en que va a conseguirlo porque el mundo de la domótica avanza a pasos agigantados. Algunas de las ventajas de vivir en un hogar digital y conectado, son poder programar la climatización y el consumo energético, la programación del encendido y apagado de todo tipo de aparatos (calderas, aire acondicionado, toldos, luces, etc.), según las condiciones ambientales. No solo eso, se puede ahorrar dinero planificando los planes de tarifas reducidas. Los avances en este campo no son de hoy. En 2014, la Comunidad de Madrid premió al mejor proyecto de domótica de 2014, realizado por la empresa +Spacio integración de Sistemas.

Este presentaba cualidades de película en el que con decir "me voy", "llego", "voy a dormir" o "voy a ver la televisión" se facilitaba el ajuste automático de las temperaturas de las diversas estancias, así como una adaptación del consumo energético según cada uno de esos momentos.  

Las casas inteligentes disponen de contadores electrónicos que informan del consumo energético. No solo eso también las hay que disponen sistemas de suelo radiante y refrescante y de aire acondicionado mediante el sistema Fan Coil, que permite reducir el consumo energético. 

En cuanto al entretenimiento y el confort, este tipo de casas cuenta con conexión a Internet desde cualquier punto, juegos en red, visión de canales de TV (televisión) en cualquier habitación, así como el control de los dispositivos eléctricos y electrónicos del hogar, desde un PC, por Internet, o desde un teléfono móvil. 

Respecto a la seguridad estas casas inteligentes ofrecen la configuración de procedimientos de avisos en caso de intrusos o avería (alarma técnica), la instalación de cámaras y micrófonos para ver lo que ocurre, así como el control del acceso a la vivienda. 

Para las personas que viven solas, poder encender la calefacción o el aire acondicionado desde la oficina o disponer de un sistema automático de riego puede tener mucho interés o para una pareja trabajadora puede que lo más interesante sea disponer de una cámara IP en su casa, que les permita ver a través de Internet a su hijo pequeño, si está siendo cuidado por otra persona.

Los sensores son los dispositivos encargados de recoger la información de los diferentes parámetros que controla el sistema de control centralizado (la temperatura ambiente, la existencia de un escape de agua o gas, la presencia de un intruso, etc.) y enviársela a la pasarela residencial para que ejecute automáticamente las tareas programadas. Los hay de diversos tipos (gas, temperatura, agua, humedad, luz, movimiento, rotura, etc.) y suelen estar distribuidos por todo el edificio.

La comodidad también es uno de los valores de estas casas que cuentan con la automatización de la climatización, iluminación, ventanas y puertas, toldos o persianas. Además estas casas pueden convertirse en un minihospital que de la primera voz de alarma porque pueden incluir la gestión de alarma médica (detección de ritmo cardiaco, detección de temperatura corporal, petición de asistencia voluntaria, petición urgente de asistencia, etc.). 

Los estudios realizados indican que las viviendas bioclimáticas reducen el consumo energético en climatización y calefacción en aproximadamente el 60 % respecto a las viviendas tradicionales, lo cual se traduce en un ahorro en las distintas facturas del gas o la electricidad de hasta el 80 %. Además contribuyen a disminuir hasta un total del 30 % el gasto de agua y un 20 % en iluminación.

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