Los rumores sobre la salud del rostro más conocido de Apple se han vuelto a disparar tras el reciente anuncio de que volvía a dejar temporalmente la compañía. De hecho, es de esperar que las cámaras intenten captar alguna imagen nueva de Steve Jobs, que se reunirá durante el día de hoy con el presidente de EEUU, Barack Obama, y otros destacados empresarios de Silicon Valley.
Eso, al menos, si finalmente se permite a los medios de comunicación acudir a la cita, que se llevará a cabo en la mundialmente conocida área empresarial. A la cita, filtrada este miércoles por ABC News, acudirán conocidas personalidades del mundo de las nuevas tecnologías como los representantes de Google, Eric Schmidt, el de Facebook, Mark Zuckerberg, o el propio Steve Jobs, en representación de Apple.
El hombre que consiguió colocar a la compañía de la manzana mordida en la cumbre de la innovación tecnológica lucha desde hace años contra un cáncer de páncreas que le mantiene con un aspecto físico visiblemente deteriorado a pesar de que ya hace casi siete años que se le extirpó una parte afectada del órgano y recibió un trasplante de hígado, toda vez que la enfermedad se había extendido por su cuerpo.
Tratamiento en la clínica de Patrick Swayze
Al hilo del debate entorno a la salud de Jobs, el diario sensacionalista estadounidense The National Enquirer ha anunciado la publicación de varias imágenes en las que se le ve acudiendo a la clínica donde recibió tratamiento por cáncer de páncreas el fallecido actor Patrick Swayze.
Jobs fue fotografiado a la salida del centro médico, el Stanford Cancer Center situado en Palo Alto, cerca de San Francisco, clínica en la que Swayze recibió tratamiento hasta su fallecimiento en septiembre de 2009 a los 57 años.
El directivo de Apple, que el 24 de febrero cumplirá 56 años, anunció el 17 de enero que se iba a ausentar un tiempo de sus funciones debido a problemas médicos; su baja alteró las bolsas y volvió a arrojar dudas sobre el futuro de Apple sin la presencia de su principal estratega.
La revista estadounidense Fortune le nombró en 2009 "empresario de la década", quien ha conseguido multiplicar por 34 el valor de la compañía, que pasó de unos 5.000 millones de dólares (unos 3.760 millones de euros) en 2000 a 170.000 millones (casi 128.000 millones de euros), ahora, por encima de Google.
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