Recomiendan prestar atención a la amenaza de sostenibilidad por degradar el territorio

Murcia.- El estudio "El desarrollo del Arco Mediterráneo Español (AME)", presentado hoy en la CAM de Murcia, recomienda prestar atención a la amenaza que representan para el desarrollo a largo plazo de esta zona los problemas de sostenibilidad derivados de la degradación del entorno natural y el agotamiento de recursos.

En concreto, el estudio, elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), menciona las consecuencias de la saturación de zonas costeras causada por la fuerte expansión de las "superficies artificiales", como son las nuevas zonas residenciales.

En la actualidad el Arco, con 160.000 kilómetros cuadrados y 23,5 millones de habitantes, concentra en la franja litoral (0-2 kms) las dos terceras partes del total de zonas artificiales de España y especialmente en Barcelona, Málaga y Alicante la construcción ocupa más de la mitad de la superficie de esta franja litoral, que ha quedado saturada, trasladando la edificación hacia franjas litorales interiores.

El informe señala además el elevado grado de aridez y de riesgo de desertización, la sobreexplotación de los acuíferos, especialmente en Alicante, Murcia y Granada, y la amenaza que representa la falta de agua para su elevado índice de potencialidad agrícola y su capacidad productiva para el regadío.

El patrón de desarrollo de las cinco comunidades del AME presenta relevantes debilidades que se manifiestan con claridad en la crisis económica actual y que requieren una estrategia de reformas para mantener su papel como eje de desarrollo europeo, ha afirmado el director de investigación del IVIE, Francisco Pérez García.

El AME se enfrenta a la necesidad de reforzar la capacidad de generar valor añadido en todas sus actividades e introducir factores basados en el conocimiento como vía para transformar las estructuras productivas y recuperar la competitividad perdida, añadió.

Además necesita reforzar la eficacia de las políticas públicas en aspectos que debilitan su competitividad, como son las dotaciones de infraestructuras de transporte, en especial el ferroviario.

En el estudio se destacan las ventajas de la localización del denominado "Arco Mediterráneo Español", así como su fuerte dinamismo demográfico, como lo demuestra que de 1960 a 2009 la población creció un 70 por ciento, cuatro veces más que la media europea.

El AME ha mantenido Productos Interior Bruto que crecían una media del 3,6 por ciento al año desde 1986 y ha sido un polo de atracción de inversiones, si bien existían unas industrias tradicionales y unas actividades terciarias caracterizadas por bajos niveles de productividad, lo que ha supuesto una de las mayores debilidades de la zona, junto a la baja inversión en I+D+i.

Se da la circunstancia que el AME tiene una fuerte capacidad de creación de empleo, con 10 millones de ocupados en 2007, pero también en esta época de crisis se está destruyendo en mayor medida que en el resto del país debido a que la costa ha concentrado las actividades más intensivas de trabajo en la construcción, hostelería y servicios.

La crisis destruyó un millón de puestos de trabajo, ha generado 2,4 millones de parados, lo que representa el 58 por ciento de los desempleados españoles, y de los que 622.000 son extranjeros.