Jae Rhim cree que la manera en la que enterramos a los muertos... no es ecológica, según la BBC. Sí, la artista estadounidense ha invertido los últimos años de su vida en el desarrollo de una sofisticada indumentaria basada en una mezcla de hongos "come-carne", que efectivamente descompone rápidamente los cadáveres, los limpia de toxinas y proporciona nutrientes a la tierra.
Le llaman el traje del entierro infinito confeccionado en una tela similar al algodón, a base de hongos y otros materiales naturales, con el que pretende que las personas reemplacen los ataúdes tradicionales. ¿El argumento? Que debemos regresar a la tierra porque somos energía.
La idea aún tiene que calar aunque los jóvenes son más proclives a apostar con entierros que no sean convencionales. Una encuesta realizada de 2015 por el Consejo de Información Funerario de Estados Unidos, indica que el 64% de adultos mayores de 40 años optaría por opciones ecológicas para su propio funeral.
¿Las opciones? Las hay cada vez más diversas. Desde ataúdes de cartón biodegradables, pasando por cementerios verdes, en las que no se ven ni monumentos ni tumbas y en la que las cenizas acaban siendo árboles o en un recuerdo en forma de diamantes.
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