Los libreros catalanes esperan facturar un 5% más este Sant Jordi

El Gremi de Llibreters de Catalunya espera facturar esta Diada de Sant Jordi un 5% más que el pasado año, según pronósticos del presidente del gremio, Antoni Daura, que explica que el primer trimestre del año se han vendido un 4,11% más de ejemplares que el mismo periodo del año pasado, lo que "hace pensar que Sant Jordi irá en esta línea".

En rueda de prensa recientemente para presentar previsiones de cara a Sant Jordi dijo que el pasado año el sector cerró la fiesta del libro con 20,96 millones de euros de facturación: "Este año como mínimo tendremos que aumentar en torno al 5%".

Según los datos del gremio, en 2016 se vendieron 45.000 títulos y, de entre todos estos, los diez más vendidos sólo supusieron un 4,33% del volumen total, por lo que prefiere no hablar de favoritos.

Ha destacado que la Diada de Sant Jordi es "indispensable y un momento mágico", en una jornada en la que prevén que Barcelona sea receptora de turismo interior, a la vez que muchos barceloneses se desplacen a pasar el fin de semana a otras poblaciones.

Ha aplaudido que parece que "poco a poco" el sector va recuperándose y que en 2016, respecto a 2015, la facturación subió un 5%, y ha asegurado que Sant Jordi llega en un buen momento porque a nivel gremial se gestionarán en Barcelona unas 200 paradas; mientras que en Catalunya se espera que las 600 librerías saquen al menos una parada cada una a la calle.

"PROBLEMAS DE DESBORDAMIENTO"

Sobre la distribución del espacio durante la jornada, el secretario general del gremio, Marià Marín, explicó que si bien el pasado año hubo "problemas de desbordamiento", en esta ocasión han habido reuniones con el Ayuntamiento de Barcelona y concretamente con los distritos para distribuir mejor la afluencia durante la jornada.

Dijo que barrios como Gràcia y Poblenou tienen muchas librerías y por lo tanto muchas paradas distribuidas, descentralizando la jornada, mientras que en zonas como Les Corts --de oficinas-- se concentrará en un solo espacio las librerías para evitar espacios vacíos.

"Tenemos un problema en el Eixample", dijo Marín sobre el eje de paseo de Gràcia, plaza Catalunya y Las Ramblas, que se intentará esponjar conquistando tramos dela Diagonal y la calle Còrsega, además del crecimiento importante del eje del paseo Sant Joan.

"Para que no haya aludes estamos esponjando espacios", dijo y subrayó que no hay una reducción de metros, sino una mayor ocupación de calles --facilitado por la ausencia de tráfico en domingo--, de manera que nadie quedará desplazado.

El presidente de la Cambra del Llibre y del Gremi d'Editors de Catalunya, Patrici Tixis, se refirió a que el "crecimiento lento pero sostenido" hace pensar que a medio plazo habrá un incremento robusto, y que este Sant Jordi se presenta francamente bien.

DESCUENTO, TODO EL FIN DE SEMANA

Aunque sea domingo, Tixis apreció "razones para el optimismo", sumado a que muchos municipios han decidido que el domingo los comercios podrán abrir puertas como aliciente para salir a la calle; además, el descuento tradicional del 10% a la compra de libros también se aplicará el sábado de manera excepcional.

No obstante, Tixis avisó que volver a recuperar los momentos de antes de la crisis será complicado en un sector que facturaba 3.000 millones de euros, y ahora se encuentra en los 2.200 euros.

En una jornada que factura el 15% anual en el caso del catalán, y de hasta el 8% en el resto de lenguas, Sant Jordi "va más allá de la lectura y el motivo de compra es diferente", según Tixis.

Para la jornada, el Gremi de Llibreters ha preparado diversas actividades, como el lanzamiento de una aplicación móvil, un concurso de 'selfies', un encuentro de las 20 Ciudades de la literatura de la Unesco, facilidades en la compra digital de libros en las librerías, y un hermanamiento con la ciudad de Palermo, entre otros.