Al menos siete personas han resultado heridas por quemaduras y arma blanca en un ataque efectuado este sábado por un individuo armado con un cuchillo y líquido inflamable a bordo de un tren de pasajeros en el cantón suizo de San Galo (noroeste del país), según ha informado un portavoz de la Policía local, Bruno Metzger, al diario 'Tagblatt'.
De momento se conoce que el atacante es un hombre de 27 años de edad de nacionalidad suiza. Los heridos son un hombre de 50 años, un joven de 17, tres mujeres de 17, 34 y 43 años y un niño de seis. El agresor también ha sido hospitalizado. El incidente ha sucedido en torno a las 14.20 horas.
El tren se ha detenido en la estación de Salez-Sennwald, donde se han desplazado tres helicópteros de rescate, tres ambulancias y expertos de las compañía de ferrocarriles. El tren se dirigía hacia el este del país, en la frontera con Liechtenstein, detalló la policía regional de St. Gallen en un comunicado.
La policía señaló que el tren había sufrido daños por valor de unos 100.000 francos suizos (92.000 euros, 103.000 dólares).
La fiscalía de San Galo ya ha abierto una investigación criminal para esclarecer el ataque.
La estación de Salez permanecía cerrada y se había instaurado un sistema de autobuses en su lugar, según el comunicado.El viejo continente, en vilo
El ataque es el último de una serie de actos violentos y ataques que tienen en vilo al Viejo Continente.
En enero de 2015, un ataque de comandos yihadistas golpeó a la revista satírica francesa Charlie Hebdo, dejando 12 muertos, mientras que otras cuatro personas murieron después en un atentado contra un supermercado kósher de París.
Después, en noviembre, una acción coordinada de yihadistas suicidas del grupo Estado Islámico dejó 130 muertos en París.
El 22 de marzo de este año, un ataque contra el aeropuerto de Bruselas y contra una estación de metro, reivindicados por el EI, dejaron 32 muertos.
Meses después, el 14 de julio, un hombre lanzó su camión contra la multitud que celebraba la fiesta nacional en la ciudad francesa de Niza, matando a 85 personas.
En tanto, Alemania sufrió varios ataques e incidentes violentos en las últimas semanas.
En julio, se registraron dos ataques ejecutados por migrantes en el estado de Bavaria, en el sur del país.
Un ataque con hacha cometido en un tren por un adolescente de 17 años, probablemente de Afganistán, dejó cinco heridos y un atentado de un sirio, que murió en el ataque, hirió a quince personas en las inmediaciones de un festival de música.
En Múnich, un tiroteo ejecutado por un joven alemán de origen iraní de 18 años dejó nueve muertos.
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