Apple contra Samsung, un culebrón judicial interminable

El conflicto judicial entre Apple y Samsung parece no tener fin. La compañía de Cupertino abrió la veda el pasado mes de abril, al denunciar a su competidor por copia de productos, al considerar que el fabricante surcoreano empleó algunos desarrollos de su propiedad en los teléfonos Galaxy S 4G, Epic 4G y Nexus S, y en la tableta Galaxy Tab.

Esa denuncia fue el pistoletazo de salida de una carrera de hostilidades que la semana pasada vivió su enésimo episodio, después de darse a conocer una nueva denuncia de Apple a Samsung.

La empresa norteamericana pide la suspensión de la comercialización de los teléfonos Galaxy en Japón y una indemnización de casi 1 millón de euros por vulneración de patentes de su propiedad.

Volviendo al principio de las hostilidades, después de la primera denuncia de Apple, Samsung contraatacó una semana después, acusando a la firma norteamericana ante la justicia de Corea del Sur, Japón y Alemania por violación de patentes en transmisión de datos y tecnologías inalámbricas.

Apple lleva ventaja

De momento, la firma de la manzana ha conseguido parar temporalmente la venta de algunos de los productos de Samsung.

En agosto, días después del lanzamiento de la tableta Galaxy Tab en España, un tribunal de Düsseldorf, Alemania, daba la razón a Apple y paralizaba la venta en Europa del dispositivo, justificando la decisión en el parecido entre el equipo de la surcoreana y el iPad. Sólo Holanda podía vender el aparato.

"No es coincidencia que los últimos productos de Samsung se parezcan tanto al iPhone y al iPad, tanto en el hardware, como en el interfaz de usuario y hasta en el aspecto físico y el embalaje", explicó en su día un portavoz de Apple.

La paralización de la venta tuvo una duración mínima. Casi en cuestión de horas la justicia levantó la prohibición.

Mientras, poco después la justicia holandesa prohibía, como medida cautelar, la venta de los teléfonos Samsung Galaxy S, Galaxy S II y Ace en los países bajos.

Samsung acuerda con Apple no vender su tableta en Australia, pero...

Apple también denunció a Samsung en Australia, pero en el país de los canguros la compañía asiática decidió llegar a un acuerdo con Apple: no distribuir la tableta hasta que la justicia se pronuncie. Si ésta da la razón a Samsung, Apple tendrá que indemnizar a su competidor por daños y perjuicios.

Así las cosas, el conflicto entre ambas compañías se antoja como un culebrón muy largo. De momento, parece que la justicia, con ciertos matices, da la razón a Apple, pero habrá que ver hasta qué punto esta constante se mantiene en el tiempo.