Cómo ha cambiado la forma de ahorrar de los españoles con la crisis

La forma que tienen los españoles de ahorrar ha dado un giro de 180 grados en apenas tres años. Con la crisis, los pequeños inversores se han visto obligados a cambiar sus estrategias para aprovechar la cada vez más escasa renta que tienen libre de gastos.

Al menos, así lo ve Inverco, la patronal de los fondos de inversión en España, que ha publicado un estudio en el que analiza los hábitos del ahorro en nuestro países y cómo la crisis ha influido en ellos.

"La incertidumbre económica incide en la psicología de los ahorradores. El ahorrador modifica su percepción del riesgo en función de las condiciones económicas en las que vive", aseguró el director general del organismo, Ángel Martínez-Aldama, en la presentación del informe, del que se pueden extraer estas 5 conclusiones:

1. Los ahorradores se hacen más conservadores

La incertidumbre que la crisis ha generado en el mercado internacional ha provocado un cambio de actitud en los pequeños inversores.

Y es que, en plena tormenta de la deuda soberana europea y con las dudas sobre la salud de la economía mundial, los mercados sufren cada vez vaivenes más fuertes. Además, a consecuencia de estas tensiones, también crece la posibilidad de que fracasen las estrategias de inversión. Por eso, los ahorradores se han vuelto más conservadores y están huyendo del riesgo.

Prueba de ello es que, según los datos de Inverco, en 2009 sólo el 25% de los ahorradores se definían como conservadores, una cifra que se ha más que duplicado en estos ejercicios. De hecho, en el análisis actual, más de la mitad de los inversores que han participado en el estudio se declara conservador (55,2%), frente al 39,9% que se define como moderado y al otro 4,9% que se autoincluye en un perfil dinámico.

2. La preocupación por cubrir imprevistos es el motor del ahorro

El motivo que lleva a los españoles a ahorrar es otro de los cambios que ha provocado la crisis. En 2009, el motor se centraba, sobre todo, en asegurar la jubilación, aunque también eran importantes obtener un rendimiento de los ahorros y tener un colchón para la educación de los hijos. Nada más lejos de la realidad actual.

Ahora, el ahorrador ahora busca generar unos ingresos extra para cubrir posibles pagos imprevistos y obtener ventajas fiscales (por las recientes subidas de impuestos). Lo único que se mantiene inalterado es el ahorro destinado a complementar  la pensión.

3. Los fondos de inversión se usan cada vez más

Y los cambios continúan, porque el ranking de los productos en los que invierten los ahorradores también ha variado desde 2009. Aunque los depósitos bancarios y los planes de pensiones siguen siendo los productos estrella, los fondos de inversión han logrado colarse en el top 3.

Según los datos de Inverco, hasta un 25% de los inversores analizados confiesa apostar por los fondos, frente al 17,1% de 2009. Este incremento se debe a que los ahorradores han decidido usarlos como alternativa: en vez de apostar directamente por la renta variable (bolsa) o la fija (bonos), invierten en ellos de forma indirecta a través de fondos.

Así, no sólo minimizan el impacto de los riesgos, sino también aprovechan las ventajas fiscales de este tipo de productos, ya que están exentos de tributación hasta el momento de su reembolso.

4. Lo más importante es la seguridad

Otra de las conclusiones del estudio de la patronal española de fondos es que la mayor preocupación de los ahorradores está en la seguridad y, en segundo lugar, en la rentabilidad, no como en 2009, cuando los dos principales factores eran la liquidez y la transparencia.

5. En quién confía el ahorrador

Pero aún hay otro cambio más. Según el análisis de Inverco, los foros y las redes sociales cada vez van tomando más peso en la vida financiera. La prueba es que el 40% de los ahorradores se informa a través de esta vía, mientras que, en 2009, sólo un 2% optaba por estas fuentes.

No obstante, las oficinas bancarias siguen siendo el asesor favorito para el 80% de los encuestados.