Diez frases que resumen el ideario económico del presidente de CEOE

    • "Si hubiese una mayor participación del sector privado en los servicios públicos se lograría, por un lado, mayor eficiencia y calidad, y, por otro, menores costes en su prestación".
    • "La patronal está en plena refundación y los sindicatos deberían hacer lo mismo, empezando por su gobernanza y su financiación"

El presidente de CEOE, Juan Rosell, muestra su último libro: 'Reformas o declive"
El presidente de CEOE, Juan Rosell, muestra su último libro: 'Reformas o declive"

'Reformas o declive', éste es el dilema al que se enfrenta España en opinión del presidente de la CEOE, Juan Rosell, y también el título de su último libro, en que el empresario de empresarios detalla, "a título personal", los cambios que considera necesarios para salir de la crisis y volver al crecimiento.

Reforma de las Administraciones Públicas, mejora de la gobernanza europea, necesidad de diseñar un modelo económico más eficiente, Rosell recorre todos los recovecos de la actividad económica para diagnosticar problemas y proponer soluciones. Resumimos su ideario en diez frases:

1. Sobre las reformas. "Es tal la problemática que cualquier iniciativa debería ponerse en consideración y no en duda. La política del 'no a todo' se impone frente a los números. Romper los esquemas mentales de quienes piensan en mantener las recetas de siempre es el principal reto".

2. Sobre la austeridad. "Algunos todavía creen que el gasto lo soluciona todo, venga de donde venga, pero cuando éste se desequilibra trae más déficit y endeudamiento. El gasto como solución es una utopía viciada que sólo sirve para confundir a la ciudadanía".

3. Sobre el despilfarro de fondos públicos. "Hemos enterrado de la manera más absurda, más frívola y menos sensata miles de millones de euros que podrían haber servido para consolidar y crear activos que rindieran en el futuro. El despilfarro debería ser un escándalo público. El gasto público debe controlarse y evaluarse con un rigor y un mimo exagerados".

4. Sobre la clase política. "Es de chiste que un presidente del Gobierno cobre unos 80.000 euros brutos al año.Los políticos están muy mal pagados. Hay que pagarlos mejor y, eso sí, reducirlos en número. ¿Cómo vamos a incentivar a los mejores a ejercer la política si están mál pagados y la valoración ciudadana es tan baja?".

5. Sobre la Administración Pública. "En España hay cuatro niveles de administraciones públicas. ¿De verdad son necesarios? Se debería plantear la eliminación de algún nivel o, al menos, agrupar algunos ayuntamientos, y también reducir el número de organismos, agencias y empresas públicas. Tener una mejor o peor administración repercute en varios puntos del PIB".

6. Sobre las privatizaciones. "¿Es lógico que una secretaria, un conductor, un agente de seguridad, un catedrático de universidad o incluso un médico sean funcionarios? ¿Qué tiene eso de función pública? Son servicios ciudadanos que pueden darse perfectamente de manera externa. Si hubiese una mayor participación del sector privado en algunos servicios públicos se lograrían mayores ganancias de eficiencia y calidad del servicio, y también un menor coste en su prestación".

7. Sobre las leyes. "Cada año se emiten más de 13.000 normas entre las comunidades autónomas y el Estado y se llenan más de 700.000 páginas de boletines oficiales. Cambiamos tanto y tan rápido la legislación que es imposible valorar objetivamente su bondad. La consecuencia de todo esto es una enorme inseguridad jurídica y mayores costes económicos para las empresas".

8. Sobre las cifras de paro. "En España los datos del desempleo tienen grandes debilidades en cuanto a exactitud. No podemos permitirnos dar informaciones que, estamos seguros, se alejan bastante de la realidad, especialmente cuando los damos a conocer en el exterior, ya que deterioramos nuestra imagen y deformamos nuestra realidad".

9. Sobre la reforma laboral. "Nuestra legislación laboral es densa, prolija y confusa. La reforma laboral ha supuesto un paso importante en su proceso de modernización, pero no va a ser la última ni será la definitiva. Hay demasiados tipos de contratos, con cinco o seis habría más que suficiente".

10. Sobre los sindicatos. "Han sido unos perfectos defensores de un statu quo en lo laboral que está archidemostrado que no funciona y que sólo es bueno para quienes tienen un empleo fijo, pero que penaliza a los que aspiran a tener un nuevo empleo. Si la patronal está en plena refundación, algo parecido deberían hacer los sindicatos, empezando por su financiación y gobernanza".

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