José Tomás, otra vez epicentro del toreo

  • La comparecencia mañana de José Tomás en en la plaza de Badajoz ha vuelto a revolucionar el cotarro taurino, naturalmente para bien, por la cantidad de comentarios a favor que despierta, aunque no faltan los que le critican sobre todo por torear sólo en tres plazas.

Juan Miguel Núñez

Badajoz, 24 jun.- La comparecencia mañana de José Tomás en en la plaza de Badajoz ha vuelto a revolucionar el cotarro taurino, naturalmente para bien, por la cantidad de comentarios a favor que despierta, aunque no faltan los que le critican sobre todo por torear sólo en tres plazas.

Porque la minitemporada de Tomás, que empieza en Badajoz, tendrá continuidad en Huelva el 3 de agosto y punto final en Nimes (Francia) el 16 de septiembre, está planteada "para generar ilusión y expectación entre la gente, aficionados y público, algo que hace mucha falta. Y para ello se ha buscado que prime la calidad", en palabras de Salvador Boix, apoderado del diestro.

Sin embargo, no está todo el mundo de acuerdo con esa apreciación de Boix, fundamentalmente porque toreando sólo en los tres escenarios citados, Tomás elude cosos de responsabilidad como Madrid, Sevilla, Bilbao, Zaragoza, Málaga y Valencia, entre otros de máxima categoría.

Claro que es la eterna cantinela, cuando no es por la cantidad, por la calidad. Pero tiene razón el apoderado cuando advierte de que "la calidad", va a estar presente en las actuaciones seleccionadas. ¿O no es importante que mañana se reten Tomás y el Juli? ¿Y que en Huelva toree mano a mano con Morante?

Para los que todavía no quieren reconocer la transcendencia que efectivamente tiene la presencia de José Tomás en los ruedos sea cuál sea el escenario y los compañeros, más que nada por el ambiente que arrastra, lo de Nimes debería ser definitivo: seis toros, seis, para él sólo. Y Nimes, hay que tener también en cuenta, es plaza "de primera".

Es "la calidad" que José Tomás aporta al toreo en tiempos tan controvertidos, haciendo que los medios generalistas del mundo entero estén pendientes de él, del hombre que a las cinco de la tarde se viste con medias rosas y traje de luces para escenificar el juego de la vida y la muerte.

Interesa mucho el estilo de Tomás, que busca la esencia del arte taurino desde las normas más puras, aunque ello signifique estar al límite de la tragedia por la entrega y el valor que esa actitud conlleva. Tomás torea más cerca que nadie y más quieto que ninguno. Eso es innegable. Es lo que engancha a las multitudes y por eso hay tantos periodistas detrás de él.

Pero hay más. Su propia filosofía de vida es de un sentido extraordinariamente generoso, como dejó claro hace un par de semanas acercándose a llevar un importante donativo (50.000 euros) a dos comedores sociales de Madrid.

No quería hacerlo público, por aquello de que ocultar a la mano izquierda lo que hace la derecha, pero accedió para que tuviera el efecto llamada: "que otros sepan lo que pasa con la gente tan necesitada".

Además de que tiene por costumbre no hablar, muy reservado siempre en su vida privada, incluso para sus planteamientos profesionales, sin embargo, esta vez habló, de las dificultades de la vida. "Hay que venir aquí y saber qué pasa con esta gente. Ayudarles a salir adelante y tomar conciencia de que todo se puede superar si uno está dispuesto".

Tomás se puso de ejemplo a si mismo cuando dijo que "alguna vez también estuve hundido y al final salí fortalecido".

Es un ejemplo, en fin, por muchas cosas. Por lo que es capaz de hacer en el ruedo, por su solidaridad en la calle. Por lo que directa e indirectamente genera por donde va.

En Badajoz, el empresario de su plaza de toros, José Cutiño, se felicitaba por el éxito que genera en la taquilla. "Gracias a él se ha pasado de 1.500 abonados a más de 3.000. Nadie se lo quiere perder. Por eso Badajoz suma, mientras otras plazas restan".

Cutiño se refería a los momentos difíciles de "la Fiesta", la controversia por los ataques de los antitaurinos y la propia crisis general que vive el país. "La panacea, José Tomás", señalaba el empresario.

Mañana no hay plazas hoteleras libres en Badajoz. Incluso para comer en los restaurantes va a ser una lotería. "Nos ha faltado establecer un canon a la industria turística por el acontecimiento que hemos propiciado, pues aquí se gana tanto o más con el negocio paralelo al del ruedo", bromeaba Cutiño.

Y sin bromas, hoy se habla de millones en Badajoz. En siete millones de euros se cifra el impacto que tendrá la presencia de José Tomás en esta corrida sobre la economía regional, según un estudio de Juan Medina, profesor de Teoría Económica en la Universidad de Badajoz, que aborda tres tipos de efectos: directos, indirectos e inducidos.

Está claro que los toros son arte, y con José Tomás también emoción y riqueza. EFE

jmnb/cr

(Recursos de archivo en www.lafototeca.com 5066620 y otros)

Mostrar comentarios