Cinco consejos prácticos para invertir de forma segura en este mercado loco

La tormenta del mercado está dejando pocos títeres con cabeza. Las bolsas mundiales siguen penalizando el miedo a que se produzca una nueva recesión económica global, mientras que el interés de  los bonos de los países periféricos crece a medida que se prolonga la crisis de deuda soberana en Europa.

Este escenario no es el más propicio para invertir, eso es obvio, pero también está dejando buenas oportunidades de inversión. Eso sí, todos los expertos creen que cualquier apuesta debe hacerse con cautela y con una estrategia bien planificada. Y éstos son los cinco consejos de la gestora Fidelity International para invertir corriendo los riesgos mínimos:

1. Tener muy claro qué tipo de inversor eres o quieres ser

La primera recomendación que hace Fidelity al inversor es que determine cuál es su perfil. Es decir, saber cuánto riesgo es capaz de asumir. Y es que, según la gestora, hay que tener en cuenta que, cuanto más peligro corre el dinero invertido, mayor es la rentabilidad que puedes obtener. Pero también crece la posibilidad de que, si te sale mal la jugada, pierdas más dinero.

2. Conocer las ventajas y riesgos de los principales activos

El segundo consejo de Fidelity es que cada inversor valore cuáles son las expectativas de rentabilidad y riesgo de los activos. De esta forma, sabrás cuánto puedes ganar y perder.

Según la gestora, los activos monetarios son una inversión muy segura. No obstante, dicha seguridad tiene un precio. "Los tipos de interés están muy bajos en las grandes economías (1,5% en Europa y 0-0,25% en Estados Unidos) y el poder adquisitivo del dinero merma incluso con una tasa de inflación relativamente baja".

Por otro lado están los bonos, que son activos que emiten los estados y las empresas para financiarse. Cuando un inversor compra bonos, el emisor le paga un tipo de interés fijo durante la vida de dicho activo (3, 5,10 años…) y devuelve la cantidad inicial íntegra (el principal) al vencimiento.

A pesar de que esta inversión parece muy segura, conlleva un riesgo de impago. Y esto es lo que está ocurriendo en Grecia, ya que se teme que el emisor no pueda afrontar los pagos de los intereses, ni del principal.

En el caso de las acciones, la principal ventaja es que el inversor puede aprovecharse de la revalorización de la empresa y del crecimiento de sus beneficios vía dividendos, que es el dinero que utilizan muchas cotizadas para recompensar a sus accionistas. Pero invertir en bolsa tiene un riesgo palpable: la caída del precio de los títulos de un valor, como está ocurriendo en la actualidad.

Por último, la gestora hace un guiño a las inversiones alternativas, como las materias primas o los inmuebles. En este caso, tanto las posibilidades de ganar como de perder dinero son superiores a las de los bonos o los activos monetarios.

3. Invertir en varios activos

Otra de las recomendaciones de Fidelity es que esta diversidad de activos sea aprovechada por los inversores.

"La diversificación siempre se ha considerado la primera línea defensiva para reducir el riesgo de inversión, ya que repartir la estrategia entre diferentes activos reduce el impacto de una caída inesperada en una de ellas", señala la gestora. Por eso, la cartera de inversión debe ser variada, de manera que las ganancias de un activo puedan compensar las pérdidas de otro.

4. La clave está en invertir pronto

El cuarto consejo de Fidelity es invertir pronto. Para la gestora, no sirve de nada programar las estrategias para que coincidan con los máximos y los mínimos de los ciclos del mercado.

Como asegura Anthony Bolton, presidente de inversiones de Fidelity, "el peor error que puede cometer un inversor particular es dejarse llevar por los mercados cuando están altos y la nota dominante es el optimismo, y salir escaldado cuando los precios caen y las perspectivas son inciertas. Y es que la clave no está en saber cuándo invertir, sino en pasar tiempo en el mercado, para que tus activos trabajen para ti".

5. Mirar siempre a largo plazo

Para la gestora, invertir a largo plazo es el padre de todos los consejos porque "los patrones del mercado revelan que a los periodos negativos les siguen años buenos. Las subidas y los descensos pueden ser frecuentes e impredecibles, pero, a largo plazo, la tendencia de las cotizaciones ha sido subir de firma continua".

Por eso, Fidelity recomienda plantear cualquier estrategia a largo plazo, ya que las posibilidades de conseguir una rentabilidad positiva aumentan cuanto mayor es la duración de la inversión.