El mercado español ha roto con cinco semanas consecutivas de ganancias. Y es que, en el balance de estos últimos cinco días, tanto la bolsa como los bonos han perdido terreno.
El Ibex ha cerrado con recortes del 1,5%, hasta quedarse en los 8.686,8 puntos, frente a los más de 8.800 en los que terminó el viernes pasado. Por tanto, en apenas cinco jornadas, ha perdido casi 200 enteros.
Mientras, en el mercado de deuda, la prima de riesgo ha sufrido muchos altibajos, aunque ha logrado quedarse estable alrededor de los 253 puntos básicos, apenas 4 enteros respecto al viernes anterior.
Y es que parece que han pesado más los excesos de las semanas previas a los acontecimientos que se han producido.
A lo largo de estas sesiones, los inversores han conocido numerosas noticias positivas. Una de ellas es que, según los indices PMI, la actividad empresarial en la eurozona está registrando en agosto su crecimiento más rápido en los últimos dos años.
Dicha cifra confirma la publicada por Eurostat la semana pasada: la eurozona creció un 0,3% en el segundo trimestre, una décima más de lo esperado.
Otra de las cifras positivas ha sido el superávit presupuestario de Alemania en el primer semestre, que alcanzó los 8.500 millones de euros.
Además, en Españase han confirmado dos datos alentadores: en julio nos visitaron casi 8 millones de turistas, una cifra récord, y las exportaciones hasta junio han marcado máximos en más de cuarenta años. Sin olvidar que el Tesoro ha captado esta semana unos 4.150 millones a un intereses más bajos que los que pagó hace un mes.
Sin embargo, los inversores se han dejado llevar por la cautela y han preferido seguir pendientes de la Reserva Federal de Estados Unidos, que aún no ha dado pistas sobre cuándo empezará a retirar los estímulos del mercado.
"Existe consenso entre la mayor parte de los miembros en que las compras deberían estar intactas al menos hasta finales de año y que es necesario plantear una hoja de ruta para comenzar a reducir el volumen de compras aunque no concretan cuando. No obstante, hay que destacar que la mejora de los datos conocidos desde la celebración de la reunión el 30-31 de julio no descartan la posibilidad de que pueda darse un cambio de postura de los miembros de la Fed (apoyado por las últimas declaraciones de algunos de ellos) para comenzar tan pronto como en septiembre", explican desde Renta 4.
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