Pemex adjudica contratos de producción de hidrocarburos en el norte de México

  • La empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) licitó hoy seis contratos incentivados a 30 años para la exploración y producción de hidrocarburos en campos maduros del norte de México, de los cuales dos fueron declarados desiertos.

México, 19 jun.- La empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) licitó hoy seis contratos incentivados a 30 años para la exploración y producción de hidrocarburos en campos maduros del norte de México, de los cuales dos fueron declarados desiertos.

Las firmas mexicanas Monclova Pirineos Gas y Alfasid del Norte ganaron dos de los contratos, mientras Cheiron obtuvo uno y la francesa Dowell Schlumberger en sociedad con la británica Petrofac logró otro, en la segunda licitación bajo este esquema.

Las mexicanas presentaron las mejores ofertas para explotar y producir crudo en los campos maduros de San Andrés y Tierra Blanca, en el noreste de México, de 3,49 dólares y 4,12 dólares por barril de petróleo extraído, respectivamente.

La empresa neozelandesa Cheiron Holdings Limited ganó la licitación para el campo Altamira, con una oferta de 5,01 dólares por barril, mientras que las filiales en México de Dowell Schlumberger y Petrofac vencieron con una propuesta conjunta en el área de Pánuco de 7 dólares por barril.

Los campos marinos de Atún y Arenque fueron declarados desiertos, el primero porque las firmas no presentaron propuestas, mientras que para el segundo las ofertas estuvieron fuera del rango fijado por Pemex de 2,50 hasta los 7,25 dólares el barril de crudo extraído.

La mezcla mexicana de petróleo se cotizó ayer a 90,30 dólares por barril.

El total de áreas iniciales licitadas hoy suman una extensión de 6.991 kilómetros cuadrados y comprenden 22 campos, donde la producción ronda los 12.000 barriles diarios de petróleo crudo y 31 millones de pies cúbicos de gas natural, informó la petrolera mexicana.

Este proceso de licitación, realizado en las oficinas Pemex Exploración y Producción (PEP) en Poza Rica, en el oriental estado de Veracruz, es el segundo de contratos incentivados desde que fueron autorizados por una reforma legislativa en 2008.

El primero se llevó a cabo el 18 de mayo pasado, cuando la británica Petrofac presentó la mejor propuesta para explotar y producir los campos maduros de Santuario y Magallanes, mientras que Administradora en Proyectos de Campos (APC), con sede en Monterrey, ganó Carrizo, todos en el estado de Tabasco.

La reforma de 2008 abrió la posibilidad a Pemex de celebrar contratos que otorguen compensaciones razonables en efectivo a las empresas que obtengan mejores resultados a través de la incorporación de tecnología avanzada, de mayor eficiencia y menores costos.

Con estos contratos, Pemex intenta atraer nuevas tecnologías y prácticas para incrementar la extracción de crudo, un área donde la iniciativa privada había estado al margen.

La reforma energética fue aprobada tras 7 meses de negociación y numerosas protestas, incluida la toma de la Cámara de Diputados por fuerzas de la izquierda durante unos días, en país donde el petróleo es un símbolo de la identidad de los mexicanos.

Este esquema está lejos de ser una privatización del sector, como ocurre en otros países donde las empresas privadas explotan el crudo y lo venden en los mercados internacionales, debido a que Pemex sigue obteniendo todos los beneficios de la comercialización de esos hidrocarburos.

Petróleos Mexicanos destacó hoy vía Twitter que "las empresas ganadoras de las licitaciones no tienen ningún derecho sobre los hidrocarburos, los cuales seguirán siendo propiedad de México".

Pemex, el cuarto productor de crudo del mundo con 2,5 millones de barriles diarios, es el mayor contribuyente fiscal de México y una de las pocas firmas que desarrolla toda la cadena productiva de esta industria.

Mostrar comentarios