Expertos dicen que la "escasa" investigación estimula el fraude fiscal en Euskadi, que supera los 3.700 millones anuales

Expertos dicen que la "escasa" investigación estimula el fraude fiscal en Euskadi, que supera los 3.700 millones anuales
Expertos dicen que la "escasa" investigación estimula el fraude fiscal en Euskadi, que supera los 3.700 millones anuales
EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

Los autores del último informe sobre el fraude fiscal en Euskadi, que cifra el impacto de estas prácticas en 3.700 millones de euros anuales, han alertado de que esta estimación "se queda corta", porque no tiene en cuenta la "ocultación" de grandes capitales a través de paraísos fiscales e ingeniería tributaria. Además, han denunciado que la "escasez" de recursos para investigar el fraude hace que las posibilidades de detectarlo sean "bajas", lo que puede suponer un estímulo a la evasión fiscal.

Los catedráticos del Instituto de Economía Pública de la UPV/EHU Ignacio Zubiri y Javier Fernandez-Macho, y la catedrática Mari Carmen Gallastegui, autores del 'Informe sobre Economía Sumergida y Fraude Fiscal en Euskadi', han presentado este trabajo, a petición del PSE-EE, ante la Comisión de Hacienda del Parlamento vasco.

El estudio, cuyo contenido fue dado a conocer el pasado 9 de junio, señala que entre 2011 y 2014, la pérdida de recaudación debida a la existencia de la economía sumergida ha supuesto una minoración en la recaudación de más de 3.700 millones de euros anuales. Sobre esta cifra, 2.320 millones de euros corresponderían a impuestos generales gestionados por Euskadi (2.000 millones) y el Estado (alrededor de 320), mientras que el resto procedería de otras formas de economía sumergida.

Los autores de este trabajo han coincidido en la necesidad de concienciar a los ciudadanos sobre la importancia de cumplir con las obligaciones tributarias para sostener servicios esenciales como la educación y la sanidad. En este sentido, Zubiri ha lamentado que "los ricos parecen haber convencido a la sociedad de que subir los impuestos es malo, especialmente si son los suyos".

Gallastegui, por su parte, ha indicado que la estimación contemplada en este trabajo es "inferior a los niveles reales de fraude", ya que en el informe no se ha contabilizado el dinero no declarado mediante fórmulas como las "deslocalizaciones ficticias" de empresas, la "ingeniería fiscal" o la disposición de "rentas en el exterior".

"MUCHÍSIMO MARGEN"

"Nos hemos quedado cortos", ha reconocido Gallastegui, que ha explicado que ella y el resto de autores del informe se han llevado una "sorpresa", al constatar que "existe muchísimo margen para seguir investigando el fraude y la economía sumergida". "No debería haber miedo por parte de nadie", ha indicado.

Esta catedrática ha reconocido que todo esto "decepciona bastante", por lo que ha defendido la necesidad de desarrollar metodologías más "eficaces" para contabilizar e identificar el mayor volumen posible de evasión tributaria. En esa línea, ha lamentado que en una cuestión de esta "importancia" exista "tan poca investigación".

Por su parte, Zubiri, en respuesta a una pregunta del PSE-EE, ha explicado los motivos de que el informe no haya tenido en cuenta las sumas no declaradas debido al uso de las citadas prácticas por parte de grandes empresas y contribuyentes con grandes capitales.

PRESUPUESTO "ESCASO"

Entre otros motivos, ha explicado que el presupuesto del que dispusieron para elaborar este informe, encargado por el Gobierno vasco, fue "escaso", por lo que tuvieron "grandes limitaciones" para poder llevarlo a cabo.

"Se podía haber ido más lejos; hay muchas cosas que no se miden y que nos habría gustado medir", ha explicado. Entre ellas, ha citado las prácticas de "ocultación" por parte de "grandes empresas", sobre las que ha destacado que "tienen sus vías y estrategias" para pagar menos impuestos y que no han podido ser "identificadas" en este trabajo.

Zubiri, que ha cuestionado la eficacia de las últimas reformas fiscales para combatir todos estos problemas, ha defendido la necesidad de crear un observatorio independiente que se encargue de evaluar la labor de las administraciones en la persecución del fraude tributario.

OBSERVATORIO

Este catedrático, que ha lamentado que el número de inspectores con el que cuentan las diputaciones sea "desconocido", ha citado algunas de las funciones que podría desarrollar un observatorio de este tipo. "¿Son las medidas de las diputaciones correctas? ¿Las aplican después de decir que las van a aplicar? Son cuestiones que no sabemos, que son esenciales; y que se podrían esclarecer" a través de un organismo de estas características, ha explicado.

Zubiri ha advertido de que es necesario que las administraciones vascas trasladen a la sociedad el mensaje de que "se toman en serio" la lucha contra el fraude fiscal. Por ese motivo, ha reclamado un "cambio de actitud" en las administraciones públicas, ya que más allá de la "buena voluntad", hay que "mejorar" los sistemas de detección y las medidas "disuasorias".

Este catedrático ha alertado de que la posibilidad de descubrir a una persona o empresa que defrauda sigue siendo "baja", lo que -según ha dicho- puede suponer un estímulo para recurrir a estas prácticas. "Y si todo va mal, como con Mario Conde, pues se esconde", ha manifestado, en referencia al expresidente de Banesto, que está siendo investigado por el supuesto blanqueo de 13 millones de euros.

Mostrar comentarios