A través de un cuento ilustrado, destinado a niños y niñas de entre tres y seis años, las autora de este proyecto buscan inculcar el respeto y el aprecio por las diferencias, el compañerismo, la confianza y el trato amable, y contribuir así a prevenir el acoso escolar desde la edad temprana.
'Todos somos raros' realiza además talleres infantiles participativos en colegios, centros culturales, bibliotecas y otros espacios que lo soliciten, a través de actividades inspiradoras derivadas de la propuesta del libro y de las experiencias de los propios niños. Según explican, se trabaja en reforzar sus propias capacidades y hacerlos receptivos a las de los demás.
Esta iniciativa es consecuencia de los "trágicos acontecimientos" recientes de 'bullying' o acoso escolar, que, según explican sus impulsoras, "han traído de nuevo a la actualidad una problemática que persiste y que es soportada por muchos niños y adolescentes en un doloroso silencio, y consentida y evadida en ocasiones por los adultos, a veces falsamente convencidos de que son 'cosas de niños'".
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