El 8,8% de profesores universitarios en Catalunya es menor de 35 años

El 8,8% de los 15.670 profesores del sistema universitario catalán era menor de 35 años en 2016 --seis puntos menos que en 2011-- y tres de cada diez tienen 55 años o más, según datos facilitados a Europa Press por la Secretaría de Universidades e Investigación de la Generalitat.

En total, 1.375 profesores eran menores de 35 años en 2016, mientras que en 2011 suponían 2.279 del total de 16.039 docentes --un 14,2%-- con los que contaba el sistema catalán, que ha perdido cerca de 400 en ese periodo.

Los tramos de edad que han visto descender su número de profesores en este lustro son los menores de 35 años y el de 35 a 45 años, mientras que han aumentado su porcentaje en los tramos de 45 a 55 años, de 55 a 65 años y de mayores de 65.

La edad media del profesorado en el sistema universitario catalán es de 49 años cuando en 2011 era de 46: el profesorado permanente tiene una media de 53 años (51 en 2011), el no permanente 40 años (38) y el asociado 45 años (43).

Un total de 4.068 profesores tenían en 2016 entre 35 y 45 años, un 26% del total, cuando en 2011 suponían 4.707 docentes, el 29,3% del total.

CRECIMIENTO DESDE LOS 45 AÑOS

La tendencia a la baja cambia a partir de los 45 años, ya que en el tramo 45-55 años, el porcentaje de profesores ha pasado del 33,2% al 34,8%, de los 5.319 de 2011 a los 5.450 de 2016.

Sin embargo, este incremento todavía es más marcado en las franjas más altas de edad: así, el tramo entre los 55 y los 65 años ha pasado de ser un 20,7% en 2011, con 3.328 profesores, a ser el 26,1% en 2016, con 4.093 docentes.

La franja de profesores mayores de 65 años prácticamente ha doblado su porcentaje, ya que en 2011 suponían el 2,5% del total, con 406, pero el año pasado creció hasta el 4,4%, con 684 docentes por encima de esa edad.

Hace un mes, la Universitat de Barcelona (UB), la Autònoma de Barcelona (UAB) y la Politècnica de Catalunya (UPC) alertaron de que el sistema universitario catalán puede perder su excelencia si no se solucionan cuestiones como el envejecimiento de los docentes --estos centros tienen una media de 50 años-- y se facilita un relevo generacional sostenido.