El presidente del Puerto participa en la inauguración en Coria de la Avenida corta de la Merlina

Además, según informa en una nota, la institución portuaria ha cedido un ancla del patrimonio industrial del Puerto que se ha situado junto al paseo marítimo del municipio.

Durante su intervención pública, Manuel Gracia ha destacado la necesidad de colaboración y cooperación entre las instituciones para "la defensa y mejora de las condiciones de nuestro río, que es razón de ser de municipios como Coria y Sevilla".

"Vamos a trabajar en la promoción del Guadalquivir bajo la convicción de que el conocimiento y la mejora del estuario son fundamentales para la actividad económica y comercial, no solo del Puerto, sino toda la vinculada al río", ha señalado Gracia.

El presidente de la Autoridad Portuaria ha definido el acto de este jueves como "un hecho simbólico, pero los símbolos también cuentan", según ha apostillado. En ese sentido, ha afirmado que con la cesión del ancla, desde la Autoridad Portuaria de Sevilla "anclamos de forma simbólica la relación entre el Puerto y Coria".

Por su parte, el alcalde de Coria ha manifestado lo que ha significado la conexión fluvial para la localidad a lo largo de la historia, recordando que "Coria tiene su origen en el río, ya que su fundación se origina en torno al Guadalquivir, y ha sido un punto estratégico para las distintas civilizaciones que se asentaron en estas tierras".

Del mismo modo, ha declarado que "Coria ha tenido puerto y muelle durante toda su historia, hasta hace 50 años. Aun así, en la actualidad es uno de los municipios que tiene más trabajadores vinculados al río", según ha puesto de relieve.

Al acto han acudido también el exrector de la Universidad Internacional de Andalucía Juan Manuel Suárez Japón, el capitán de navío Francisco Javier Bugatto, representando a la Comandancia de Marina; el capitán Luis Carlos Belotto Morales, representando a la Capitanía Marítima; y Santiago Montenegro, Jefe de Servicio Provincial, representando a la Demarcación de Costas.

La Corta de Merlina facilitó el acceso marítimo a Sevilla con seguridad, omitiendo los trayectos en curva y disminuyendo el tiempo de paso para los navíos. La corta de 600 metros sustituyó un trazado de unos diez kilómetros que suponían horas de navegación para los barcos.

Así, esta obra del año 1794 fue la primera actuación de este tipo que se realizó en el río y supuso el comienzo de la modernización del Guadalquivir.