Rusia continúa renovando su arsenal armamentístico y ha presentado nada más y nada menos que un nuevo misil conocido como “Satán 2”. Se trata de un misil balístico intercontinental Sarmat que puede llevar una ojiva nuclear... ¡de hasta 40 megatones! Lo que supone un potencial de hasta 2.000 veces el de las bombas de Hiroshima y Nagasaki.
La nueva arma de destrucción masiva tiene un potencial tan grande que puede destruir una zona del tamaño de Francia o el estado de Texas en los Estados Unidos, según una estación de radio nacional rusa.
El Satán 2 tiene un alcance de hasta 10.000 Kilómetros de distancia desde su punto de partida, y viaja a una velocidad de 7 kilómetros por segundo. Además Rusia asegura que está diseñado para sobrepasar los sistemas antimisiles modernos, por lo que los expertos y organizaciones internacionales lo están viendo como parte de una Rusia cada vez más amenazadora en cuanto a sus armas y sistemas militares.
Aunque, el proyecto llevaba cinco años en desarrollo se espera que la primera remesa de este misil esté lista para el año 2018, fecha en la que el presidente Putin espera reemplazar al viejo SS-18 (Satán) que tiene más de 30 años.
La comunidad internacional no se está tomando nada bien este anuncio, sobre todo porque ven los actos del gobierno ruso como un acto de provocación, actos a los que hay que sumar los 'paseos' de los bombarderos rusos por el Canal de la Mancha o los movimientos de tropas en las fronteras.
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