Zaragoza, 18 ago.- Una vaquilla ha sido abatida hoy tras el encierro de las fiestas de Pedrola (Zaragoza), después de que haya reventado los tubos que protegían el cerrojo de la puerta de acceso a la localidad y causado magulladuras y contusiones a dos jóvenes en su huida hacia campo abierto.
Así lo ha explicado a Efe el alcalde, Felipe Egido, quien ha señalado que la decisión "no ha tenido duda" y ha sido "totalmente consensuada" y adoptada por la Guardia Civil, la Policía Local -que ha ejecutado el tiro con un rifle- empleados municipales y el propio ganadero.
Los hechos han comenzado sobre las 9.00 horas cuando la última vaquilla del encierro, de unos 350 kilogramos de peso y "una de las más fuertes" según el edil, haya reventado los tubos del cerrojo de la puerta metálica "de más de dos metros de alto" que protegían el acceso a la población cuando el pastor trataba de meterla al corral.
La vaca ha logrado acceder a las calles del pueblo en busca de una salida y en su escapada ha provocado magulladuras y contusiones a dos jóvenes que, afortunadamente, no han resultado heridos por asta.
Ambos, de unos 16 años, han sido trasladados en ambulancia al hospital Clínico de Zaragoza, donde uno ya ha sido dado de alta y el otro está pendiente de evaluación en el servicio de traumatología, según han informado a Efe fuentes del Gobierno de Aragón.
El animal ha logrado finalmente llegar a campo abierto, a una distancia de un kilómetro o kilómetro y medio, según el alcalde, y, aunque ha sido controlado, ha amagado después con regresar a la población, por lo que se ha tomado la decisión de abatirla "por prevención".
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