Cámaras de vigilancia en los pueblos contra los ladrones

Carmen T. Izquierdo

Ávila, 9 mar.- Primero robaban el cobre y ahora, también, otros materiales que incluyen aluminio e, incluso, los ladrones hacían incursiones en las propias viviendas, una situación que ha llevado a las organizaciones agrarias de Ávila a pedir que se aumente la vigilancia en los pueblos, aunque sea instalando cámaras de vigilancia.

"En algún pueblo de Soria ya se está aplicando y creemos que con buen resultado", ha explicado a Efe el secretario general de Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Ávila, Ignacio Senovilla, quien hoy ha llevado la propuesta, dentro de la Alianza por la Unidad del Campo, al subdelegado del Gobierno en Ávila, José Luis Rivas, con quien se han reunido varios líderes agrarios abulenses.

Para la Alianza por la Unidad del Campo, el medio rural y, en especial, la zona norte de la provincia de Ávila, la comarca de La Moraña, está viviendo un clima de "inseguridad" y "miedo" provocado por la oleada de robos que "en los últimos dos meses" ha alcanzado a municipios como Arévalo, Pajares de Adaja, Fuentes de Año, Cabezas del Pozo, Aldeaseca o Madrigal de las Altas Torres.

Según Ignacio Senovilla, los casos de Cabezas del Pozo, donde en una noche se cometieron hasta veinte robos en viviendas particulares, o Madrigal de las Altas Torres, donde, ayer, un agricultor, comprobó que le habían robado 300 aspersores, son "claros ejemplos" de la situación que se está viviendo.

En su opinión, se trata de "bandas organizadas" que han sembrado el "miedo" entre la población, por lo que las organizaciones han propuesto que se instalen detectores de matrículas en la carretera principal de entrada a los municipios, además de cámaras de vigilancia en el edificio más alto del pueblo e, incluso, alarmas en zonas donde haya un patrimonio artístico y cultural "relevante".

También han reclamado "que se refuerce" el Plan contra Robos en Instalaciones Agrícolas y Ganaderas y que se haga una vigilancia especial con el "refuerzo" de agentes en Castilla y León de las unidades de reserva de la Guardia Civil, para "que realicen tareas de vigilancia" y "se reduzcan los delitos".

"Poner puertas al campo es imposible", ha opinado, por el contrario, Jesús Muñoz, presidente de UCCL-Jóvenes Agricultores en Ávila.

Para esta organización, también presente en la reunión de hoy con el subdelegado del Gobierno, las medidas deberían pasar por una "mayor presencia" de agentes de la Guardia Civil, que, además, "deberían controlar más los centros de recepción de la chatarra", convencidos de que es en esos lugares donde está el origen de muchos de los robos cometidos.

Para Muñoz, que diferencia entre los robos de cobre y aluminio registrados en La Moraña y los que, en la comarca de Alberche-Pinares, se han producido de ganado, con casos en los que se ha descuartizado a las reses en la propia finca, la "colaboración ciudadana" también sería "fundamental", de cara a "que avisen a la Guardia Civil cuando vean en más de una ocasión un vehículo rondando o a gente desconocida".

El subdelegado del Gobierno en Ávila, ante esta situación, ha acordado un nuevo encuentro con las organizaciones agrarias y la Guardia Civil, para estudiar las medidas que se pueden implantar, aunque, en declaraciones a Efe, ha incidido en que a lo largo de 2011, de manera "global", el número de delitos de este tipo en el medio rural "ha disminuido", a pesar de que "ahora" se han dado casos "muy seguidos" que, según ha reconocido, han despertado la "inquietud" entre la población.