Dimite jefe regional inteligencia alemana por fallos en lucha contra neonazis

Berlín, 11 jul.- El máximo responsable de la inteligencia del estado federado alemán de Sajonia, Reinhard Boos, presentó hoy su dimisión por los fallos cometidos por su institución en el seguimiento de la célula terrorista neonazi destapada en noviembre del año pasado.

Boss es el tercer jefe del contraespionaje alemán en abandonar su cargo, con fecha 1 de agosto, como consecuencia de los flagrantes errores cometidos por las autoridades federales y de los estados federados, que permitieron que la célula pudiera asesinar a nueve inmigrantes y una policía entre 2000 y 2007.

El pasado día 2 fue Heinz Fromm, presidente de la Oficina Federal para la Defensa de la Constitución, que integra los servicios interiores de inteligencia y la lucha contra el terrorismo, el que presentaba su dimisión.

Mientras, era el estado federado de Turingia el que retiraba provisionalmente de su cargo al jefe de la inteligencia regional, Thomas Sippel.

El ministro del Interior de Sajonia, el cristianodemócrata Markus Ulbig, quien anunció la dimisión de Boos en el parlamento regional, habló de flagrantes errores de conducta de determinados colaboradores de la Oficina de Defensa de la Constitución regional.

Precisó que sólo ahora han aparecido las actas de unas escuchas telefónicas de la Oficina Federal de Defensa de la Constitución de finales de 1998, aunque no detalló el contenido del material.

Hasta este momento, el ministro había asegurado una y otra vez que Sajonia había publicado todos los documentos relativos al caso.

Ulbig señaló que se han abierto de inmediato medidas disciplinarias contra algunos de los empleados del servicio de inteligencia regional.

Asimismo subrayó que Boos lamenta profundamente estas circunstancias y se siente enormemente decepcionado.

En este sentido, el ministro señaló que Boos le trasmitió que en este contexto le es imposible continuar ejerciendo su cargo con la confianza necesaria.

La célula "Clandestinidad Nacionalsocialista" (NSU), un comando terrorista neonazi constituido por tres personas y formado en 1998, actuó hasta su descubrimiento a finales del año pasado en el más absoluto anonimato y con total impunidad, periodo en el que, además de asesinar a diez personas, colocó bombas y atracó bancos.

La policía no descubrió la existencia de la célula hasta el suicidio el 4 de noviembre de 2011 de Uwe Böhnhard y Uwe Mundlos, en la localidad germano-oriental de Eisenach, que acabaron con sus vidas al verse acosados por la policía tras un atraco bancario.

Beate Zschäpe, la tercera integrante del comando, se entregó a las autoridades tras volar por los aires la vivienda en Zwickau, también en el este de Alemania, que servía de refugio y base para el trío asesino.

Pese a que las actividades del trío neonazi eran conocidas desde 1998, la Oficina Federal para la Defensa de la Constitución y su filial en Turingia fueron incapaces durante más de una década de relacionar con ellos la cadena de asesinatos y demás delitos cometidos.