Descartan muerte de niño guatemalteco por soldados beliceños

Una investigación de expertos forenses independientes, elaborada para la Organización de Estados Americanos (OEA), descartó el viernes que soldados beliceños provocaran las heridas de bala que mataron a un niño guatemalteco en la frontera no delimitada entre ambos países el 20 de abril pasado.

Las indagaciones fueron hechas por el estadounidense James Hamby y la mexicana Patricia Trujillo, a petición de la OEA, y recogen testimonios de personas involucradas en el incidente armado donde perdió la vida el menor Julio Alvarado, de 13 años, y resultaron heridos su padre y hermano.

"Las heridas que causaron la muerte de Julio Alvarado no fueron ocasionadas por proyectiles de arma de fuego de las Fuerzas de Defensa de Belice", dijo en conferencia de prensa la uruguaya Magdalena Talamas, representante de la Secretaría General de la OEA para asuntos de Belice y Guatemala y encargada de entregar el informe a la cancillería guatemalteca.

Talamas indicó que la investigación evidenció que las heridas fueron provocadas por una escopeta y un rifle que portaban miembros de una ONG de ambientalistas beliceños que acompañaban la patrulla de soldados y que encontraron a los guatemaltecos realizando cacería ilegal a 562 metros al este de la llamada zona de adyacencia que administra Belice.

Aunque los soldados beliceños accionaron una carabina "en defensa propia", no impactaron a los guatemaltecos, agregó el informe.

También "hay evidencia" que los guatemaltecos realizaron disparos contra los beliceños por orificios de bala en dos ramas de un árbol "hechas desde donde estaba posicionada la familia Alvarado", agregó la delegada de la OEA.

Por su parte el canciller beliceño Wilfred Elrington dijo a periodistas en su país que el reporte también evidencia que no era la primera ocasión que el menor ingresaba ilegalmente a su territorio.

Siete días después del incidente la OEA anuncio la investigación independiente a solicitud de los gobiernos de Guatemala y Belice.

Por la muerte del menor el ejército guatemalteco reforzó la presencia en las zonas colindantes con Belice, donde mantiene un diferendo territorial desde hace más de 150 años.