Barrow ha realizado una visita oficial de dos días a Francia en la que se ha reunido tanto con representantes políticos como empresariales. El mandatario gambiano llegó al poder tras un delicado pulso político con su predecesor, Yahya Jamé, que se negó a reconocer su derrota.
"Esta alternancia democrática constituye una señal positiva para Gambia, la región y el continente", ha destacado Hollande, según un comunicado del Elíseo en el que se han ensalzado las reformas anunciadas por el flamante mandatario gambiano y la continuidad del país en el Tribunal Penal Internacional (TPI).
Precisamente, los dos países han acordado la celebración en Banjul de un foro centrado en la justicia transicional para demostrar, con ejemplos, "la importancia de los procesos de justicia y reconciliación".
Tanto Hollande como Barrow han mostrado su interés por estrechar lazos en distintos ámbitos. En materia de seguridad, han abogado por colaborar para mejorar la formación de las fuerzas de seguridad gambianas, mientras que en temas económicos quieren fomentar la ayuda y la inversión.
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