Marine Le Pen visita la Trump Tower pero no se reúne con Donald

  • Le Pen aseguró en noviembre que Trump tenía su teléfono y que tenían "conocidos en común desde hace tiempo"

    Tomó café con tres hombres de traje y corbata en una mesa del Trump Ice Cream Parlor, situado en la planta baja

    Fue uno de los primeros políticos en felicitar a Trump por su sorpresiva victoria electoral del 8 de noviembre.

Marine Le Pen visita la Trump Tower pero no se reúne con Donald
Marine Le Pen visita la Trump Tower pero no se reúne con Donald

La candidata presidencial francesa de extrema derecha Marine Le Pen visitó el jueves la Trump Tower en Nueva York, pero no se reunió con el presidente electo Donald Trump ni con nadie de su equipo.

La presidenta del Frente Nacional (FN), que encarna la ola populista en Francia, tomó café con tres hombres de traje y corbata en una mesa del Trump Ice Cream Parlor, situado en la planta baja de la Trump Tower.

Uno de ellos era el vicepresidente del FN, Louis Aliot, y otro el empresario italiano George Guido Lombardi, vecino del presidente electo en la Trump Tower -ocupa los pisos 62 y 63- y que es su contacto con la extrema derecha europea, aunque no integra su equipo oficial.

Le Pen aseguró en noviembre que Trump tenía su teléfono y que tenían "conocidos en común desde hace tiempo". Interrogada el jueves por periodistas sobre si se reuniría con Donald Trump, se negó a responder.

Le Pen no había anunciado su visita a Nueva York. Su director de campaña dijo en París que se trataba de una visita "privada" y no dio ningún detalle sobre su agenda.

Al contrario que el dirigente eurófobo británico Nigel Farage, de la formación UKIP, que se reunió con Trump poco después de su elección, Le Pen "no se reunirá con nadie de nuestro equipo", dijo la portavoz del magnate inmobiliario Hope Hicks a periodistas.

Consultado también sobre una posible reunión Le Pen-Trump, el principal portavoz del presidente electo, Sean Spicer, había indicado un poco antes: "No hay reuniones. Es un edificio público".

La Trump Tower, un edificio con muchos negocios y en cuyas alturas reside desde hace años Trump y su familia, sigue abierto al público, aunque se han instalado fuertes medidas de seguridad en los accesos tras el triunfo del multimillonario republicano.

Le Pen, que se autodenomina "anti-establishment" porque rechaza ideas tanto de la izquierda como de la derecha, fue uno de los primeros políticos en felicitar a Trump por su sorpresiva victoria electoral del 8 de noviembre.

También lo felicitó cuando Trump dijo que había persuadido a Ford a producir uno de sus modelos de automóviles en Estados Unidos en lugar de en México, aunque Ford afirma que su decisión se basó puramente en razones financieras.

¿Quizás esperaba una reunión de último minuto facilitada por Lombardi? Su pareja Aliot simplemente dijo en un mensaje de texto que Le Pen no haría "ninguna declaración".

A media tarde, nadie la vio salir de la Trump Tower, pero hay entradas laterales que muchas veces son usadas por personajes importantes.

Las encuestas en Francia prevén que Le Pen, que no pasó de la primera vuelta en las presidenciales de 2012, llegará a la segunda vuelta en las elecciones de mayo, en las que se elegirá al sucesor del mandatario socialista François Hollande.

El no reunirse con Trump le valió el sarcasmo del equipo de campaña de su rival conservador, François Fillon, ex primer ministro de Nicolas Sarkozy.

"La representante del FN se precipita a Estados Unidos, del otro lado del Atlántico, trata de tocar a la puerta de Trump, que apenas se la abre. Es un poco lamentable", tuitéo Bruno Retailleau, coordinador de la campaña de Fillon.

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