"Tenemos un horizonte de menos incertidumbre que hacía unas semanas", ha declarado Videgaray en el Foro América --organizado en Madrid (España) por Europa Press y Estudio de Comunicación con el patrocinio de BBVA--, donde ha sido presentado por su homólogo español, Alfonso Dastis.
En un "momento difícil", ha recalcado que siempre ha visto en esta circunstancia "oportunidades para redefinir algunas cosas que se pueden mejorar". "Estas oportunidades las vamos a aprovechar si somos capaces de mantener un diálogo a la altura de esta relación", ha aclarado.
Por ello, Videgaray considera fundamental que ambos estados enfrenten el proceso de diálogo de una "manera constructiva y de buena fe", en la que la conversación con Estados Unidos "debe ser integral".
"Para nosotros, el objetivo número uno es el respeto de los Derechos Humanos y civiles de los mexicanos inmigrantes residentes en el país vecino, un reto al que hemos destinado grandes recursos que buscan garantizar la protección y la representación legal de nuestros compatriotas en el exterior", ha explicado.
Las restrictivas políticas migratorias del presidente estadounidense, Donald Trump, tienen en vilo a más de 35 millones de mexicanos residentes en Estados Unidos, que representan el grupo extranjero mayoritario. Debido a esto, Videgaray ha subrayado la necesidad de que "prevalezca la coordinación en materia migratoria".
Una de las propuestas de campaña más polémicas del presidente republicano fue la construcción de un muro en la frontera con México, una promesa electoral que espera llevar a cabo. Al respecto, Videgaray ha reconocido que "Estados Unidos tiene un derecho pleno y soberano de proteger las fronteras de la forma que decida", aclarando que el muro "no es un tema de la agenda bilateral".
"Por supuesto que México no contribuirá de forma alguna en la construcción de la frontera, pero es un tema ajeno", ha sentenciado Videgaray, tras lo cual ha reiterado que "México cree en los puentes, no en los muros".
MÉXICO, DISPUESTO A RENEGOCIAR EL TCLAN
En el aspecto económico, el canciller mexicano ha hecho mención al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TCLAN, o NAFTA, por sus siglas en inglés). Videgaray ha expresado su deseo de que éste "conserve su esencia", aunque se ha mostrado dispuesto a modificar el TCLAN, "siempre y cuando siga implicando el libre comercio y no pierda su carácter trilateral".
Asimismo, ha puntualizado, cualquier modificación en términos comerciales "debe ser beneficiosa para los ciudadanos mexicanos. "Los trabajadores mexicanos tienen que estar en el centro de cualquier negociación de acuerdos comerciales", ha declarado.
Los otros dos grandes desafíos que enfrentan las relaciones bilaterales de México con su vecino del norte se encuentran, según el canciller, en el tráfico de drogas y armas y en la región centroamericana.
De acuerdo con Videgaray, ambos países enfrentan una "responsabilidad compartida en el Triángulo del Norte", por lo que se ven en la necesidad de hallar una solución conjunta en el desarrollo político, social y económico de dicha zona.
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