Los hechos ocurrieron este miércoles por la tarde, cuando un grupo de personas invitadas por el PPCV gritaron y lanzaron insultos durante la intervención de Salvador en el pleno en el momento en el que intervenía en relación sobre el Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde (Pativel).
Morera ha recordado que, según el artículo 497 del Código Penal en sus apartados 1 y 2, "incurrirán en la pena de prisión de seis meses a un año quienes, sin ser miembros del Congreso de los Diputados, del Senado o de una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma, perturben gravemente el orden de sus sesiones". "Cuando la perturbación del orden de las sesiones a que se refiere el apartado anterior no sea grave, se impondrá la pena de multa de seis a doce meses", han precisado desde las Corts.
Este jueves durante la sesión de control, el jefe del Consell, Ximo Puig, ha denunciado los hechos y ha mostrado el apoyo del gobierno a la consellera María José Salvador y al director general Luis Ferrando. "Esta es la sede del respeto y la tolerancia, ahora y siempre", ha destacado.
Puig ha manifestado además que el PPCV, que "ha sustentado intelectualmente esta cuestión", actúe en consecuencia, a lo que la síndica de los 'populares', Isabel Bonig, ha mostrado su repulsa a estos hechos.
"Nuestra repulsa a los hechos de ayer pero también a los del diputado Alfredo Castelló (PP) por parte de un miembro que estaba en la tribuna. Las amenazas de muerte que yo sufro y los escraches de cuando yo era consellera nadie los condenó", ha lamentado.
INSULTOS Y ADVERTENCIAS
Durante la intervención de Salvador, un grupo de personas profirió una serie de insultos a la consellera, como "sirvengüeza", hasta que fueron retirados por los servicios de la cámara. Morera le pidió en varias ocasiones que abandonaran el hemiciclo y les advirtió de que estaban interrumpiendo la sesión, lo que podría suponer incurrir en responsabilidades.
En ese momento, uno de los invitados exhibió una camiseta que llevaba puesta y se levantó, dejando el pecho al aire. Una vez retirados de la tribuna de invitados, Morera recordó que las Corts son "la casa de la palabra", pidió disculpas por lo sucedido y aseguró que los participantes en el altercado serían identificados y no volverán a entrar en la cámara.
La consellera terminó su intervención asegurando que esto ocurre "cuando se hace demogogia y se miente". "El PP ha conseguido lo que quería". A continuación, Bonig pidió la palabra "por dignidad de su grupo" ante las "acusaciones" de Salvador, y expresó su rechazo a lo sucedido. No obstante, añadió que la cámara es "la sede del pueblo", que "estaba arriba" (en referencia a la tribuna) y "demostraba con palabras lo que opina". "Que empiecen a escuchar a la gente y a la calle", reclamó.
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