Inglaterra busca un triunfo que termine por devolver la calma

Inglaterra necesita una victoria ante Eslovenia el martes en la tercera fecha de la fase de clasificación para Rusia-2018, con la que apagar por completo las últimas brasas que dejó el escándalo provocado por el exseleccionador Sam Allardyce.

Sorprendiendo por una cámara oculta ofreciendo su ayuda para infligir la normativa en materia de fichajes, Allardyce se vio obligado a dejar el cargo, tomándolo con carácter interino Gareth Southgate.

A las órdenes del exjugador del Aston Villa, los Pross superaron con más dificultad de la prevista a la modesta Malta (2-0), pero son líderes de la llave con pleno de victorias.

El martes se enfrentan en Eslovenia al combinado local, que suma una victoria y un empate en sus dos primeros partidos. El país del nuevo presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, encontrará en los ingleses a una buena piedra de toque para calibrar su nivel real después de medirse con Lituania y la República Eslovaca.

Escocia (4 puntos) intentará aprovechar un posible tropiezo de sus vecinos del sur para colocarse líder si derrota a Eslovaquia, que cuenta sus partidos por derrotas.

Además, este martes vuelve a entrar en liza la campeona del mundo. Alemania se impuso por 3-0 sus dos primeros partidos, y no se atisba ningún equipo en su llave (C) que pueda hacer peligrar su clasificación como primera de la llave.

En ambos partidos previos el delantero Thomas Muller anotó sendos dobletes, por lo que Irlanda del Norte, el rival del martes, saldrá de inicio con un muro de hormigón defensivo en busca de evitar la goleada, como ya ocurrió en la pasada Eurocopa, en la que los germanos sólo se impusieron por 1-0, con un gol de Mario Gomez, ausente ahora por lesión.

Después del compromiso ante los norirlandeses, Alemania se enfrentará a San Marino en noviembre, por lo que tiene al alcance de su mano lograr 12 puntos de 12.

"Les dije a los jugadores que sólo seré feliz si logramos el máximo número de puntos en nuestros dos próximos partidos", expresó el técnico alemán Joachim Low, que definió a su rival del martes como "un equipo con pasión, con jugadores de raza". "Muchos de los jugadores ya estuvieron en la Eurocopa, así que ya sabemos lo que nos espera en Hanóver", añadió.

Por el momento, Azerbaiyán es el único que mantiene el ritmo de la Mannschaft. El combinado azerí tendrá una difícil salida ante la República Checa.

Por último, en la llave E, Polonia, cuartofinalista en la reciente Eurocopa, en la que cayó eliminada ante el campeón Portugal en los penales, se impuso el sábado a Dinamarca por 3-2, con un triplete de su capitán Robert Lewandowski. Pero su decepcionante empate ante Kazajistán en el primer partido de clasificación mundialista le obliga a ganar en casa a Armenia.

Polonia no podrá contar con el lateral derecho del Borussia Dortmund, Lukasz Piszczek. Su baja se une a las del delantero del Nápoles Arkadiusz Milik, que sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, y la del defensa del Legia Varsovia Michal Pazdan, aquejado de una lesión en la espalda.

Rumanía, que se mide con Kazajistán, y Montenegro, que viaja a Dinamarca, encabezan la llave junto a Polonia, los tres con cuatro puntos.