Archivada la investigación judicial por el puente de Calatrava en Venecia

Roma.- El juez de instrucción italiano Giandomenico Gallo ha decidido archivar la investigación judicial abierta por las obras de la construcción del puente que el arquitecto español Santiago Calatrava diseñó para la ciudad de Venecia y que fue inaugurado en 2008 en medio de una gran polémica.

Según informa hoy el diario veneciano "Il Gazzettino", el juez ha admitido la solicitud formulada por parte del fiscal Carlo Nordio, que no ve ningún indicio de delito en la construcción, pero para el que ha existido una falta de profesionalidad en las obras del que ya es el cuarto puente que cruza el Gran Canal veneciano.

Las autoridades judiciales de Venecia investigaban a los ingenieros Salvatore Vento y Giuseppe Scibilia, quienes trabajan para el Ayuntamiento de la ciudad, por un supuesto delito de abuso de poder.

La Fiscalía cree que ha habido una "radical incapacidad de comprender la complejidad técnica inherente en una obra tan ambiciosa" y así lo refleja en el informe divulgado hace unas semanas, en el que pedía el archivo del caso.

Nordio, según refiere "Il Gazzettino", habla además de "gravísimos errores" en la construcción de esa moderna obra de ingeniería y de "zafia despreocupación que raya el cinismo" en el caso del difícil acceso de los minusválidos al puente.

El fiscal considera que quienes participaron en este proyecto manifestaron una "imperturbable indiferencia hacia los sujetos más débiles" a fin de privilegiar "consideraciones de tipo estético".

Habla además de la posibilidad de que existiera un "acuerdo tácito" entre las autoridades municipales de Venecia y el propio Calatrava para hacer que el puente, una obra "tan compleja y costosa", pareciera económicamente conveniente para la ciudad.

Precisamente el coste de la construcción fue uno de los asuntos más polémicos de esta obra, pues la ceremonia de inauguración en septiembre de 2008 tuvo que ser cancelada ante la amenaza de protestas por parte de los partidos conservadores presentes en el Ayuntamiento.

Se quejaban del elevado coste de la construcción del puente respecto del presupuesto inicial, que pasó de 4,7 millones a 20 millones de euros por una obra de la que se llegó a decir también que era "demasiado moderna" para Venecia.

El pasado septiembre el diario romano "La Repubblica" informaba de un informe de la Autoridad italiana para la Vigilancia de las Contratas Públicas en el que se asegura que el puente "no es seguro", algo desmentido posteriormente por el Ayuntamiento veneciano y por la oficina de Calatrava.

El llamado "Puente de la Constitución" es una estructura ligera y flexible que mide 94 metros de largo y que cuenta con un ancho que varía entre los 5,58 metros y los 9,38 de algunas partes.