Belbel acaba con sabor agridulce sus siete años de director artístico del TNC

  • Sergi Belbel deja este domingo las funciones de director y programador artístico del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), que ha ejercido durante siete años, con un guiño a los espectadores desde el escenario y un sabor agridulce por los problemas que ha tenido el teatro debido a la crisis económica.

Barcelona, 29 jun.- Sergi Belbel deja este domingo las funciones de director y programador artístico del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), que ha ejercido durante siete años, con un guiño a los espectadores desde el escenario y un sabor agridulce por los problemas que ha tenido el teatro debido a la crisis económica.

Belbel ha explicado durante una entrevista con Efe que, tras acabar su contrato con el teatro público, vuelve a su vida privada y a lo que ha sido toda la vida: "Un 'free lance', desde los 23 años hasta los 43 que tenía cuando ingresé en el TNC como director".

Como no tiene "vocación de director de teatros", continuará "dirigiendo teatro", ha bromeado, y escribirá teatro, porque ha "descuidado la autoría" a lo largo de los pasados años y está convencido de que tiene que "recuperar esa autoría perdida".

Entre los textos destacados que ha firmado Belbel está "Después de la lluvia" (1993), obra que se ha representado en 30 países, y "Caricias", estrenada en el Teatro Romea en 1992, o "A la Toscana", presentada en el TNC en 2006.

Hace un año, el director teatral daba a conocer su última temporada, la actual, con el anuncio de que dirigiría "La Bête" (La Bestia), una obra en la que se enfrenta el concepto de teatro culto con el de popular y para la que contaba con Anna Lizaran como protagonista.

Pero Lizaran falleció en enero pasado, se la llevó un cáncer en cuatro meses, y Belbel perdió a la "amiga, confidente y gran actriz" que "estaba en lo mejor de su carrera" y que con "Agost", que se representó anteriormente en la Sala Gran del TNC, "consiguió traspasar barreras" y dar el salto hacia el gran público.

La temporada 2012-2013, la última de Belbel, "ha sido la más triste de todas", ha dicho el director teatral, "primero por la muerte de Anna Lizaran y después por la crisis económica".

La crisis económica significó una caída de ingresos para el teatro debido a la disminución de ingresos propios, a entradas más caras con el aumento del IVA y a su funcionamiento con presupuesto prorrogado de la Generalitat, de quien depende el teatro, que se tradujo en el cierre de la Sala Tallers, anulación de obras programadas y despidos de personal.

"Ha sido como un peso que te va hundiendo -ha explicado Belbel-, aunque por suerte estos últimos días hemos tenido una subida (de ingresos) con el éxito de 'Barcelona', de Pere Riera, y dos obras del proyecto T-6, subida que nos ha animado un poco".

Según los datos difundidos por el teatro, en siete temporadas, desde la 2006/2007, la primera de Sergi Belbel, hasta la 2012/2013, se han programado 140 producciones de espectáculos, 3.133 funciones y 1.074.395 espectadores, con una media de ocupación del 72,66 % con datos a 16 de junio de 2013.

Belbel cerrará su responsabilidad en el teatro y con ella también la programación de la obra "Atraco, paliza y muerte en Agbanäspach", de Nao Albet y Marcel Borràs, en la que aparece de "malo, camuflado con unas barbas".

Al final del espectáculo, "me las quito (las barbas) y muero desangrado en los brazos de su mujer, una diva de la ópera, ante la mirada de su público", en un acto de ironía o divertimento al que han querido los autores que se añada Belbel en este final de mandato.

No obstante, no le faltan los proyectos, ya que volverá a dirigir, a propuesta de Emma Vilarasau, un Beckett, "Días felices", a finales de la temporada del Lliure, mientras que a principios de temporada dirigirá en La Villarroel una obra de Jordi Galcerán, su amigo del alma, titulada "El crédit", con Jordi Bosch y Jordi Boixaderas, además de un trabajo en televisión que no desvela.

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