Color impresionista y fuerza romántica en la cita de la Orquesta de París

San Sebastián, 23 ago.- El público de la Quincena Musical tendrá ocasión hoy y mañana de disfrutar del recorrido que ofrece la Orquesta de París desde los colores y las armonías impresionistas de la "Siesta del Fauno" de Debussy y el "Concierto para la mano izquierda" de Ravel, a la fuerza romántica de Beethoven o Schumann.

Estas son algunas de las obras que el conjunto francés ofrece en el Kursaal bajo la batuta de Yoel Levi, principal director de la Orquesta Nacional de Île-de-France hasta hace unos meses y actual director invitado de la Filarmónica de Israel, y con el joven pianista francés Jean-Frederic Neuburger como solista.

Como ya comunicó la Quincena hace unos días, Levi ha sustituido a última hora al director previsto, Christoph von Dohnányi, aquejado de una gastritis aguda que le ha impedido acudir a la cita donostiarra.

El cambio no ha afectado al programa inicial, que se ha mantenido, según ha explicado el director de la Quincena Musical, Patrick Alfaya, y ha agradecido al maestro Levi que haya accedido al ofrecimiento de la Quincena, para lo cual se ha visto obligado a interrumpir sus vacaciones.

El programa arranca hoy con una de las obras cumbres de Claude Debussy, "La siesta del Fauno", un poema sinfónico impregnado de elementos fantásticos, oníricos y eróticos, que fue estrenado en París en 1894 y que está basado en la obra literaria del simbolista Stephane Mallarmé.

"Es una joya" de la música, que con una mínima orquestación crea un color y unas armonías que configuran una "atmósfera increíble que la hace única" y constituye además un tipo de música que la Orquesta de París "lleva en su sangre", ha afirmado durante la presentación de los conciertos el maestro Levi.

Aunque no es la primera vez que dirige a este conjunto, los conciertos de hoy constituirán su debut en el Kursaal, una sala de la que ha dicho que le han llegado noticias sobre su "buena acústica" y en la que ha prometido "alguna sorpresa según sea la respuesta del público".

La velada de hoy continuará con el "Concierto para la mano izquierda" que Maurice Ravel compuso para que fuera interpretado por Paul Wittgenstein, un pianista polaco que perdió su brazo derecho en la I Guerra Mundial, y que Jean-Frederic Neuburger, de 24 años, "interpreta de una manera que si se cierran los ojos parece que son dos manos" las que ejecutan la obra, ha explicado Levi.

La cita de hoy se cierra con la "Sinfonía número 7" de Dvorak, una pieza en la que se mezcla un "fuerte sabor eslavo" con la influencia del dramatismo de Brahms.

El espíritu romántico de Berlioz abrirá el concierto de mañana, que comenzará con la obertura de "El Corsario", una obra muy popular para cuya composición el músico francés se inspiró en Lord Byron, y que según ha explicado hoy el director requiere de "mucho virtuosismo y brillantez por parte de la orquesta".

El pianista Neuburger, un asiduo de la música contemporánea que, ha señalado el director artístico de la Orquesta de París, Didier de Cottignier, dejó impresionado por su talento al compositor contemporáneo Pierre Boulez, se introducirá en el sonido romántico por antonomasia del Concierto para Piano" de Schumann.

La cita concluirá con la "Sinfonía número 3" de Beethoven, conocida como la Heroica, que para algunos autores marca el inicio del romanticismo en la música, "muy poderosa y muy dramática" y que "levantará el ánimo" del respetable, ha concluido Levi.