De Ocampo ensaya el "teatro de la posibilidad" en un instituto de Sevilla

  • Roberto Jiménez.

Roberto Jiménez.

Valladolid, 24 oct.- El "teatro de la posibilidad" o de lo que es factible si en un proyecto educativo y escénico convergen empeño, talento y sentido común, se ha convertido en el documental "Piratas y libélulas" de la realizadora española Isabel de Ocampo, estrenado hoy en la 58 Semana Internacional de Cine de Valladolid.

Los protagonistas de esta realidad filmada son un grupo de estudiantes, payos y gitanos, pertenecientes al Instituto de Educación Secundaria "Joaquín Romero Murube", ubicado en el Polígono Sur de la ciudad de Sevilla, donde De Ocampo ha sido testigo de una estrategia formativa que ha resultado "mágica y aleccionadora".

Varios docentes de ese centro de Educación Secundaria, implicados de forma voluntaria en sus horas libres, han involucrado a una serie de estudiantes payos y gitanos en el montaje de la obra de teatro "Romeo y Julieta", de William Shakespeare, con fines culturales y académicos pero también de índole social.

"En el momento del rodaje se produjeron en el barrio unos sucesos, una chispa de violencia racial que afectó a los chicos (participantes en el proyecto) hasta el extremo de provocarles un debate interno entre violencia sí o no", ha comentado la realizadora salmantina en una entrevista con Efe.

Los alumnos del grupo de teatro pudieron trasladar a la vida real los valores de la tragedia de Shakespeare que ensayaban, hasta el punto de sentirse "tocados y apelados por la obra", por los valores que encierra: "la magia se produjo", ha agregado De Ocampo, formada en la Escuela de Cine de Madrid (ECAM), forjada en el ámbito de la publicidad y dueña de un exitoso currículo centrado en el corto.

De ese modo, los estudiantes situaron con facilidad el concepto del odio que el dramaturgo inglés tendió entre las familias de la pareja de enamorados (Romeo y Julieta), además del "valor eterno" de esa pieza teatral, "pero también comprendieron que el odio y el amor son los grandes sentimientos que mueven al ser humano desde el tiempo de las cavernas", ha reflexionado.

Entre las conclusiones que ha extraído de esta experiencia Isabel de Ocampo, desde 2012 presidenta de la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), figura la sensación de que la violencia "no tiene nada que ver con las razas sino con los sentimientos", vengan de donde vengan.

Otra de las lecciones recibidas, ha insistido la directora, ha sido la de que el talento "puede surgir en los lugares más inhóspitos" e inesperados como en el Polígono Sur, de donde ha salido uno de los mejores músicos españoles de los últimos tiempos, como a su juicio es el guitarrista Raimundo Amador.

"Puede brotar e imponerse en los lugares más inhóspitos siempre que se cuide y se proteja", ha añadido esta realizadora, autora hasta la fecha de un largometraje, "Evelyn" (2012), que este año ha recuperado la Seminci de Valladolid dentro de la sección no competitiva Spanish Cinema.

"Piratas y libélulas", que sí opta al palmarés de la 58 Seminci en el apartado Tiempo de Historia, es también "un homenaje a la educación pública a través de los profesores que han dedicado a este proyecto muchas horas libres, no lectivas, fruto exclusivamente de su compromiso personal", ha considerado.

Uno de esos docentes, profesora de lengua y literatura, ha sido quien ha acuñado el término de "teatro de la posibilidad" para definir un empeño no tanto académico como formativo, donde "funcionan los sentimientos" y que consiste en dejar hablar a los alumnos, escucharles, percibir los problemas que tienen y ayudarles a resolverlos, ha concluido De Ocampo.

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