Dulce Pontes dice que el fado es un "trabajo espiritual" que permite "compartir las heridas"

  • Madrid.- La cantante portuguesa Dulce Pontes conmemora veinte años de carrera en "Momentos", un doble álbum en el que actuaciones y temas de estudio están marcados por el fado, un estilo al que ella llama un "trabajo espiritual", con el que logra "desnudarse" y "compartir las heridas".

Dulce Pontes dice que el fado es un "trabajo espiritual" que permite "compartir las heridas"
Dulce Pontes dice que el fado es un "trabajo espiritual" que permite "compartir las heridas"

Madrid.- La cantante portuguesa Dulce Pontes conmemora veinte años de carrera en "Momentos", un doble álbum en el que actuaciones y temas de estudio están marcados por el fado, un estilo al que ella llama un "trabajo espiritual", con el que logra "desnudarse" y "compartir las heridas".

"Es un orgullo interior", explica en una entrevista con Efe la cantante portuguesa, que reivindica la existencia de un género "desconocido", el "fado humorístico".

En "Momentos", Pontes incluye temas habituales suyos como "Lágrima", "Naufrágio", "Fado os maias" o "Una mulher na cidade", y canciones inéditas como "Canção do mar", "Por esse mar" o "Verde pino, verde mastro".

Además, homenajea a su tío, Carlos Pontes, un "fadista bohemio", autor del fado humorístico "Júlia Galdéria".

El primer CD del álbum está basado en su lo que ella califica como de "camino principal" y que no es otra cosa que el fado y la música popular portuguesa, que viene de la escuela de José Alfonso.

"Dentro de la cultura musical portuguesa hay muchísimas expresiones de otros pueblos y para un creador es una paleta inmensa de posibilidades", explica la artista.

Para la segunda parte de su trabajo, se ha "aventurado" en colaboraciones que ido produciéndose a lo largo del tiempo "de forma natural" y que son una "forma de compartir", como el dueto con José Carreras, "Todos somos um".

Carreras tiene una "gran voz", con la que retrata el "mestizaje y la conjunción tímbrica" de esta canción, compuesta por la propia Pontes como himno oficial del certamen de las Nuevas 7 Maravillas del Mundo.

El griego George Dalaras participa en "O mar e tu", mientras que Ennio Morricone colabora en la música de "Amor a Portugal/Your love" y "No ano que vem".

"No tengo memoria temporal pero sí emocional", admite Pontes, quien cree que al menos quince de los veinte años que lleva cantando se los debe a España y reconoce que Madrid es la ciudad donde más ha cantado.

El directo es lo que más le gusta y tras escuchar mucho material de sus conciertos se encontró con grabaciones "sensibles y fuertes", que tenía que incluir en un trabajo para reflexionar sobre los distintos momentos que ha vivido.

"Me encantan los directos y siempre intento que las grabaciones en estudio sean lo último", subraya Pontes.

En sus conciertos desarrolla "la expresión y la capacidad de desnudez", algo que busca siempre en el estudio, "mirando el micrófono e imaginando que esta la gente dentro", porque tiene la necesidad de "sentir" el público.

La artista está considerada como la heredera de Amalia Rodrigues, por unos, y como la "voz de Portugal", por otros, algo que ella siente como "un elogio y una responsabilidad". "Entiendo la intención, pero siempre existe la tendencia esa de a rey muerto, rey puesto".

Pontes ya ha utilizado poemas de Fernando Pessoa o António Lobo Antunes porque cree que hay "piezas perfectas", donde la poesía y la creación musical "se abrazan como dos amantes".

La canción sin letra "Nu" es la que cierra "Momentos" y es una "ventanita" para el próximo trabajo, que se llamará "Nudez". Además, está preparando un disco en castellano, gallego, vasco y catalán.

Letras de compositores españoles y latinoamericanos se unirán en este nuevo álbum, en el que no faltarán "Alfonsina y el mar" o "La niña del fuego", y que seguramente contará con la colaboración de Estrella Morente, con quien realizó la gira "Dulce Morente".

Dulce Pontes está inmersa en un tour que pasará por España, Holanda, Argentina, Grecia, Turquía y Croacia, entre otros.

Isabel Ferrer

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