El Matt Damon que decoraba carpetas ya no existe

Hace ya catorce años, dos amigos del barrio subieron al escenario del Kodak Theatre de Los Angeles para recoger su hasta ahora primer y único Oscar. Eran Ben Affleck y Matt Damon, que acababan de ser galardonados por su guión al alimón de 'El indomable Will Hunting'. Fue en ese momento de palabras entrecortadas, sonrisa sempiterna y agradecimientos atropellados cuando se lanzó la carrera de Damon, un actor versátil que ha sabido elegir bien sus papeles en la dura pecera de Hollywood.

Este año cumplirá los 41, así que hace mucho que dejó de ser aquel chico rubio de ojos azules que decoraba carpetas de adolescentes y que había entrado en esto del cine por la puerta grande. Antes de escribir y protagonizar el guión de 'El indomable Will Hunting', Matt Damon había hecho alguna que otra cosa en la pantalla grande. Como aparecer de extra en la mítica 'Campo de sueños' en 1989. En realidad, su debut oficial lo tuvo un año antes con 'Mystic Pizza', protagonizada por Julia Roberts. Pero aquellos y los que llegaron después hasta 1997 fueron sólo tanteos. Llegó a participar en las pruebas de 'Las dos caras de la verdad' (1995) y 'Todo por un sueño' (1996), pero Edward Norton primero y Joaquin Phoenix después le ganaron la partida.

Entonces llegó Will Hunting. Damon interpretó a ese indomable y brillante personaje que le dio a conocer mundialmente y lo grabó en la retina del gran público. Después de aquello llegaron muchas más, 'Salvar al soldado Ryan', 'Rounders', 'Dogma' (en esta de nuevo con su amigo Affleck), 'El talento de Mr. Ripley', 'La leyenda de Bagger Vance'… Quizá el mayor reto de todas estas fue la de interpretar al retorcido Ripley. Consiguió que su personaje diese hasta cierto reparo o, más bien, provocase repulsión. La carrera de Damon estaba encarrilada, los proyectos no escaseaban y había años en los que incluso protagonizaba varios estrenos.

En el año 2000 se cruzó en su camino una casi desconocida para los estadounidenses Penélope Cruz. Trascendió que, en el rodaje de 'Todos los caballos bellos', la ficción traspasó la realidad y Damon cayó en brazos de su compañera de reparto. La cosa, dicen, duró poco. Un año después, llegó uno de los dos papeles que Damon ha repetido más veces, como Linus Caldwell en 'Ocean's eleven'. Junto a Brad Pitt y George Clooney, el actor bostoniano hijo de padres divorciados entró a formar parte de una saga que ya ha visto su tercera entrega. Igual que la franquicia Bourne.

Con el estreno de 'El caso Bourne' (2002) Matt Damon se reveló como un buen actor de acción. Se le había visto haciendo personajes perdidos, desorientados, pillos, románticos, pero no se sabía, hasta entonces, cómo se desenvolvería repartiendo golpes y manejando un arma. Cierto es que su papel como el agente desmemoriado Jason Bourne tiene algo de esa tortura interior que tan bien sabe reflejar, pero las tres entregas estrenadas hasta ahora no dejan de ser películas de ritmo y lucha. Sobre todo las dos últimas, cuando Paul Greengrass tomó los mandos de la dirección. Precisamente con este director repitió en otra del mismo estilo, 'Green Zone', estrenada el año pasado.

Drama, romance, acción… ya sólo podía faltar la comedia. Quizá éste no sea su punto fuerte, pero ha demostrado que, si se pone a ello, sabe sacar cierta vis cómica. Lo dejo claro en 'Pegado a ti', 'El soplón' e, incluso, en 'Valor de Ley'. Ésta última llega hoy a las pantallas. Un western dirigido por los hermanos Coen en el que interpreta a un ranger estirado y ridículo del que resulta fácil mofarse. En ella, como en 'El soplón' o en 'Más allá de la vida' se ve a un Damon con algún kilo de más, muy alejado del tipo que suele lucir como Jason Bourne.

Con decenas de títulos a sus espaldas y un currículum tan variado, puede presumir de ser uno de los actores con una de las carreras más sólidas del panorama internacional. Ha trabajado con grandes directores. Steve Soderbergh ('El soplón', la saga Ocean), Martin Scorsese ('Infiltrados'), Paul Greengrass (Bourne, 'Green Zone') o Clint Eastwood ('Invictus', 'Más allá de la vida') y no le faltan películas en las que reclamen su presencia. Actualmente se haya inmerso en una auténtica espiral de trabajo que le convertirá en los próximos dos años en uno de los rostros más presentes en los cines.

'Más allá de la vida' sigue aún triunfando en cartel y 'Valor de ley' aterriza hoy. No es todo. Aún tiene pendientes para este año 'Destino Oculto', 'Margaret', 'Happy Feet 2', 'Contagion' (en ésta de nuevo a las órdenes de Soderbergh y con Gwyneth Paltrow, Marion Cotillard, Kate Winslet y Jude Law) y 'We Bought a Zoo' (de Cameron Crowe y con Scarlett Johansson como partenaire). En su agenda no queda ni un hueco libre. A la batería de títulos de 2011 hay que sumar los dos que tiene ya previstos para 2012. El primero, en fase de producción, será el siguiente trabajo de Soderbergh, 'Liberance', en el que aparecerá también un recuperado Michael Douglas. Además, está anunciada su participación en 'Elysium', de Nelly Blomkamp, el de 'District 9'. Y todo esto con cuatro niñas -tres de ellas pequeñas- en casa fruto del matrimonio con la argentina Luciana Bozán.