El Palau de les Arts seguirá cerrado hasta que no haya garantía de seguridad

  • El Palau de Les Arts Reina Sofía de Valencia suspenderá todas sus actividades hasta que no haya garantía de seguridad para el público, ha asegurado hoy el conseller de Economía, Máximo Buch, quien también ha anunciado acciones legales contra los responsables de los desprendimientos de la cubierta.

Valencia, 27 dic.- El Palau de Les Arts Reina Sofía de Valencia suspenderá todas sus actividades hasta que no haya garantía de seguridad para el público, ha asegurado hoy el conseller de Economía, Máximo Buch, quien también ha anunciado acciones legales contra los responsables de los desprendimientos de la cubierta.

Buch ha convocado una rueda de prensa para explicar las acciones emprendidas por el Gobierno valenciano ante el desprendimiento, ayer por la tarde, de una "pequeña parte" del revestimiento cerámico de la cubierta de este edificio, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava, debido a las fuertes rachas de viento registradas ayer.

Ha explicado que se ha encargado un informe al Instituto Tecnológico de la Construcción (Aidico), que estará listo el próximo 3 de enero y determinará qué partes de la cubierta tienen riesgo de desprendimiento y cómo debe realizarse su desmontaje.

El 8 de enero se reunirá el consejo de administración de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA) para aprobar las medidas que permitan retomar la actividad, así como las acciones legales y responsabilidades correspondientes, sobre las que se empezará a trabajar esta semana pues, según Buch, "es evidente que alguien ha hecho algo mal".

Mientras tanto, el coliseo suspenderá toda su actividad porque aunque se puede permitir la entrada de grupos reducidos a través de un pequeño pasillo, no se puede garantizar una evacuación en actos masivos, por lo que la programación que se vea afectada se trasladará o se suspenderá.

Ha señalado que el informe de Aidico es independiente del encargado a una empresa de ingeniería, después de que a principios de este año se detectaran ya "abombamientos excesivos" en la cubierta de esta infraestructura, y se estableciera un perímetro de seguridad por riesgo de desprendimientos.

Este documento, para el que se ha contratado a tres profesores de la Universitat Politènica de València (UPV), estará terminado a finales de enero y determinará dónde está el error de la obra.

Buch ha explicado que tras producirse los desprendimientos se convocó a los técnicos del Palau y a especialistas de Aidico, con quienes se concluyó que el riesgo de desprendimiento "era mayor que antes", y se decidió aumentar el perímetro de seguridad y suspender la actividad.

Asimismo, se estableció un comité de seguimiento integrado por el conseller, los secretarios autonómicos de Turismo y Comercio y de Cultura, y los directores generales del Invasat y de CACSA, y se encargó el nuevo informe que estará la próxima semana.

Buch ha señalado que la Administración se hará cargo del desmontaje de las partes con riesgo de desprendimiento, y luego trasladará su coste a los responsables, pero de la reposición del "trencadís" se encargará el responsable de esta situación.

Ha afirmado que se exigirán explicaciones a todas las partes, tanto al despacho de Calatrava como a las empresas encargadas de la ejecución de la obras, aunque la responsabilidad última la determinarán los informes y, en última instancia, un juez.

"No sabemos si el problema es de diseño, de construcción o de materiales, pero evidentemente alguien ha hecho algo mal", ha asegurado el conseller, quien ha dicho que "salvo que alguien se declare voluntariamente responsable y se haga cargo de los daños, habrá que establecer acciones judiciales".

Al respecto, ha indicado que esta semana se empezará a trabajar en los aspectos legales para que el día 8 el consejo de CACSA tome los acuerdos pertinentes y ha asegurado que se pueden reclamar responsabilidades porque "ahora hay una evidencia de hay algo mal" pues "se ha caído un trozo del techo".

Respecto al tipo de acciones a emprender, ha dicho que las desconoce y serán las que indiquen la Abogacía de la Generalitat y los asesores legales de CACSA.

Buch ha indicado que se trata de una situación que "disgusta" al Gobierno valenciano por tratarse de "un edificio emblemático", y ha indicado que no se ha hablado directamente con Calatrava sino con personal y técnicos de su oficina.

Preguntado por el rodaje de la película de Disney que está previsto que se inicie el 7 de enero en exteriores de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el conseller ha indicado que las zonas en las en las que se va a rodar no hay ningún riesgo aunque esto último, ha incidido, deberá ratificarse con el informe de la próxima semana.

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