Ávila.- El matador César Jiménez encara su décima temporada con la mirada puesta en la madrileña Feria de San Isidro de la que espera "salir vencedor" y cita que considera "fundamental" para quienes no figuran en los primeros ciclos del año como Valencia, Castellón y Sevilla.
Afincado en la provincia de Ávila, Jiménez (Fuenlabrada -Madrid-, 1984) ha garantizado que este año estará "sin ninguna duda" en Madrid porque así se lo han prometido y con esa perspectiva, para salir triunfador de una "apuesta tan fuerte", centra ya toda su preparación.
Jiménez ha señalado, en una entrevista con EFE, que quiere "continuar con la línea del año pasado, con esa actitud y esa forma, intentando mejorar, y luego Dios dirá".
Este año ha toreado ya en Candeleda (Ávila) y en Valdemorillo (Madrid) donde ha recibido la simbólica "Chimenea de Platino" como mejor torero de la feria, y sus próximos compromisos son la Goyesca de Puertollano (Ciudad Real), el 20 de marzo, y Barbastro (Huesca), el 3 de abril.
"Tengo varias corridas y en cuanto a ferias tengo hablado Madrid, para San Isidro y alguna otra cosa, pero nada confirmado aún", ha señalado el torero.
Jiménez considera que la crisis no afectará a la fiesta "mucho más que el año pasado", aunque reconoce que "quizás sea algo más dura la temporada" y piensa, no obstante, que "ha venido bien al toreo".
Respecto al pasado año, Jiménez ha comentado que fue una temporada "en buena línea", si bien "fue al final cuando vinieron los triunfos más seguidos" y a ello contribuyó la ausencia de percances, sobre lo que el torero apunta que tuvo "suerte", porque le "cogen pocos toros" y los que lo hacen no le hieren.
De sus actuaciones en 2010 ha destacado la tarde en su localidad natal, Fuenlabrada, donde cuajó "la faena que mejores sensaciones" le dejó, aunque "evidentemente no tuvo la repercusión de las de Albacete o Murcia, por ser las plazas que son".
Sobre sus características como torero, ha manifestado que le gusta "tanto el capote como la muleta", pues cuando está a gusto lo está "con todo", y ha afirmado que es "de los toreros que mejor han toreado de rodillas".
"Comenzar la faena de rodillas es algo que me ha acompañado a lo largo de toda mi carrera y creo que lo hago bastante bien", asegura Jiménez, quien explica que su costumbre de descalzarse es una "manía" que tiene pero no lo hace para "destacar".
Hace dos años ha iniciado su carrera como empresario en las plazas abulenses de Arenas de San Pedro y Candeleda, actividad que le agrada aunque su intención no es ser empresario taurino sino "fomentar la fiesta".
Eduardo Cantalapiedra
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