Expertos mexicanos denuncian pasividad de Gobierno ante daños patrimoniales

  • Un grupo de investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) denunció hoy supuestos daños en contra del patrimonio histórico y arqueológico mexicano y la pasividad del Gobierno frente a sus señalamientos.

México, 14 ago.- Un grupo de investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) denunció hoy supuestos daños en contra del patrimonio histórico y arqueológico mexicano y la pasividad del Gobierno frente a sus señalamientos.

"Es una aberración histórica verdaderamente atroz para la memoria del pueblo de México que debe ser investigada a profundidad, por lo que ello significa para nosotros y las próximas generaciones", dijo en una rueda de prensa Felipe Echenique, secretario general del sindicato de profesores del INAH.

Los investigadores denunciaron que los hechos más graves son la construcción de un museo sobre un basamento prehispánico en la zona arqueológica de Tzintzuntzan, en el occidental estado de Michoacán, así como la colocación de un techo metálico sobre el Fuerte de Guadalupe, en Puebla, obras que fueron autorizadas por funcionarios del INAH.

Por ello, desde fines de julio miembros del sindicato de académicos y de arquitectos conservadores del patrimonio cultural del INAH bloquean las taquillas del Museo de Antropología de la capital, y exigen una reunión con el secretario de Educación, José Ángel Córdoba, quien se ha negado a recibirlos.

Desde entonces es gratuita la entrada al museo más visitado del país, donde los expertos están pidiendo firmas a los ciudadanos para que se sumen a sus denuncias que, según explicaron, están fundamentadas en dictámenes arqueológicos e históricos de especialistas.

"La construcción de un edificio sobre vestigios prehispánicos es violatorio a la legislación vigente y contraviene las disposiciones internacionales", dijo Echenique, quien aseguró que el INAH lo ha permitido incluso conociendo las restricciones que impiden este tipo de obras en una zona arqueológica.

Esta construcción no solo provoca daños a vestigios arqueológicos, sino que genera "una afectación visual y volumétrica" del sitio, apuntó.

Por ello, estimó "conveniente que se abra una investigación y se definan responsabilidades por la afectación ocasionada a la zona arqueológica".

En cuanto al techo metálico, aseguró que fue "indebidamente" autorizado por los funcionarios del INAH, a pesar de que "distorsionan y banalizan" el sitio de un hecho histórico con gran trascendencia para la historia mexicana como es la Batalla de Puebla.

Los expertos pidieron la suspensión inmediata de estas obras, así como la dimisión de algunos funcionarios, como el director general del INAH, Alfonso de María y Campos Castelló.

Como respuesta a estas denuncias, el INAH se limitó a colgar en su página web un documento en el que asegura que las obras se han realizado "en estricto apego a la normatividad y de conformidad con los lineamientos internacionales que rigen este tipo de proyectos".

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